Editorial: Los verdaderos culpables

     E d i t o r i a l
       Los verdaderos culpables
Mientras abundan las especulaciones del por qué de la tragedia en el incendio que llevó a la muerte a más de 90 personas en el fatal incendio de gasolina, muy pocas personas reflexionan hacia los VERDADEROS responsables, que los hay, y de carne y hueso, sólo que la multitud de comentarios en las redes sociales sólo se ajustan a tender una especie de cortina de humo pretendiendo que se saquen las auténticas conclusiones para identificar a los culpables tanto materiales como a los autores intelectuales de este crimen que se convierte en un crimen de lesa humanidad. ¿Por qué no se pregunta y se investiga a quien o quienes PERFORARON el ducto, y quiénes son los que realizaron multitud de llamadas telefónicas a los pobladores para invitarlos (incitarlos) a acudir al lugar a robarse la gasolina. Estas personas, son las VERDADERAS CULPABLES DE ESTA TRAGEDIA, y no parece resultar demasiado difícil identificar a los causantes justo cuando el gobierno federal y el titular del ejecutivo, son blanco de una campaña mediática para atacar todas las acciones que lleva a cabo el presidente de México, sobre todo en lo que se refiere a las acciones en contra del robo de los combustibles. Es decir, no es descabellado sospechar que se trata de la misma mafia que ahora ataca al gobierno federal y lo culpa de todo, los culpables de haber hasta organizado esta tragedia nacional que quedará grabada por siempre como una de las tragedias más lamentables y peor aún, si como se sospecha, fue un acto criminal perversamente planeado lo que sería un acto de lo más deleznable e inhumano. Comentarios como éste son testimonios reales de lo que ahora comentamos, reproducimos lo escrito por el periodista Enrique Galván texto que no tiene desperdicio alguno:
 "Justo cuando México se pregunta: ¿qué priísta ordenó perforar el ducto en Tlahuelilpan, quién llamó a las personas para robar el combustible y quién encendió el ducto? asesinan a La Parca, líder huachicolero (priísta) en Hidalgo. ¡Fayad no quiere dejar testigos!" 
Otro ejemplo de cinismo: Felipe Calderón escribe en Twitter: debemos recuperar el sentido de respeto a quienes tienen la tarea de cuidar el orden. Lamenta que los agentes del orden público prefieren o tienen la consigna de evitar roces con la población y no intervenir por la fuerza en eventos de masas. Llega a esta conclusión: Se pierde el respeto, se pierde el orden y ocurren estas tragedias (Tlahuelilpan)......... No sorprende que piense así, todos lo sabemos, Calderón tiene las manos manchadas por la sangre de millares de mexicanos que fueron asesinados en su sexenio por los agentes del orden público y ciertamente no ganaron respeto. Fue un comandante supremo indigno de las fuerzas armadas.
 En Tlahuelilpan ocurrió exactamente lo contrario a lo que dice: las tropas ganaron respeto porque no hicieron lo que en el pasado han hecho en diversas ocasiones: masacrar a la población.
Contrario a lo esperado. Los videos muestran a soldados tratando de persuadir a la gente para que se retirara del lugar, eran entre 600 y 800 personas y muchos se alejaron. De no ser así estaríamos lamentando no ochenta y tantos muertos, sino muchos más. Otros no se fueron y respondieron con insultos a los uniformados, incluso un video muestra a un sujeto que tira patadas a un transporte militar. ¿Cuántos de ellos murieron en la explosión? El secretario de la Defensa, general Luis Cresencio Sandoval, un militar norteño oriundo de Ensenada, hizo lo que tenía que hacer mediante una contención responsable. Sin represión fueron salvadas muchas vidas. Si las cosas hubieran sido distintas, Calderón, Fox, la Coparmex, la chayocracia, etcétera, estuvieran gritando que México se había convertido en una sangrienta dictadura. https://semanariohorizontes.com