Por Arturo Fernández Ramírez
Las cifras oficiales muchas veces son cuestionables, sobre todo cuando una situación está generalizada y la mayoría percibe algo diferente a lo que la autoridad dice al respecto.
Parece que así está sucediendo con el dengue, que continúa propagándose a más personas cada día que pasa. En la mayoría de las familias cuando menos un miembro ha padecido ya esta enfermedad.
Clínicas, hospitales y centros de salud se encuentran saturados por pacientes con esta enfermedad. Y los consultorios médicos han atendido en mayor medida a personas que acuden porque tienen dengue.
Por eso nos resulta extraño el número oficial que se maneja como número de personas infectadas por el dengue o que incluso han fallecido a causa de esta enfermedad mortal cuando se convierte en hemorrágico.
Si bien es cierto que ya se ha reconocido que Jalisco ocupa el primer lugar a nivel nacional en casos de dengue, superando a Veracruz, no menos deja de ser verdad que desde un enfoque estatal, se ve reducido el número que se informa.
De acuerdo a las cifras oficiales publicadas la semana pasada, se afirmó que nuestra entidad federativa superó a Veracruz en el número de casos registrados de dengue, ubicándonos en el primer lugar a nivel nacional con 7 mil 662 confirmados a la semana epidemiológica 43, reconociéndose, además, que hubo 660 nuevos registros.
Insisto, la percepción social es diferente, ya que es común preguntar entre las familias o conocidos si algún miembro ha padecido el dengue y resulta que en la mayoría al menos uno ha sufrido este padecimiento, por eso, si sumamos los casos de los 125 municipios de Jalisco, la cifra que se aporta como oficial (7,662) pareciera que no corresponde a la realidad.
Pero independientemente de los números y casos de dengue, lo cierto es que no podemos ni debemos bajar la guardia, tanto las autoridades como nosotros en nuestros respectivos hogares, extremando las precauciones y cuidados para evitar ser contagiados con el dengue.
Es importante que tomemos conciencia que, aunque las autoridades tienen la obligación de llevar a cabo acciones preventivas, nosotros también tenemos una gran responsabilidad en el combate a esta enfermedad y debemos empezar con la limpieza en nuestros hogares para evitar que el mosco transmisor de este padecimiento habite ahí mismo.
Adicional a ello, existen otras medidas, desde el utilizar repelentes y consumir bebidas y comidas que fortalecerán nuestro sistema inmunológico para evitar que nos afecte más esta enfermedad en caso de que resultemos contagiados.
Obviamente, los adultos mayores se convierten en el sector más vulnerable frente a esta enfermedad, por lo que, con mayor razón, debemos cuidarlos y protegerlos, pero los jóvenes no se deben confiar porque también ha habido decesos en este segmento de la sociedad.
Considero que así, en forma conjunta, gobierno y sociedad, podremos no solo frenar que siga creciendo el número de infectados con esta enfermedad, sino que lo revertiremos hasta que ya nadie sufra del dengue. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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