martes, 21 de mayo de 2024

 EDITORIAL; Homenaje a la mujer

Mucho se dice y mucho se habla de las mujeres que son madres y de las que, no pariendo hijos aman de igual manera.

Cuanta misericordia, comprensión y entrega se necesita apara alcanzar el nivel de lo que es Dios: amor sin restricción, sin distinción, sin pago ni espera de recompensa; con todo entrega, esfuerzo y soporte.

La canción de Facundo Cabral expresa todo de una manera completa, cabal. Por eso se las expongo "Élla no dice nada":

En la introducción de su canción nos dice: Élla tiene la costumbre de fundarnos la esperanza con su hermosa manera de acomodarnos la almohada; élla nos dice "te quiero" con la camisa planchada y es tan cierto lo que tiene que para siempre alcanza; nuestra casa siempre estuvo donde quiera que élla estaba, por eso, esté donde esté siempre me siento en casa. Y suelta su milonga.


 


“Ella no dice nada, sólo cocina.

¡Vaya a saber la causa! ¡vaya a saber la causa! ¡vaya a saber la causa! De su alegría.

Élla no dice nada, sólo sonríe. Élla no dice nada, sólo sonríe. Élla no dice nada, sólo sonríe. 

Cuando en lugar de sopa, cuando en lugar de sopa, cuando en lugar de sopa. Sirve jazmines.

Élla no dice nada lava y suspira. Élla no dice nada lava y suspira. Élla no dice nada lava y suspira.

Y a veces hasta vuela, y a veces hasta vuela, y a veces hasta vuela de distraída.

Élla no dice nada, pero se entiende, Élla no dice nada, pero se entiende, Élla no dice nada, pero se entiende.

Porque se pasa el día, Porque se pasa el día, Porque se pasa el día, teje que teje."


La mujer en su aceptación de engendrar la vida nos regala un nuevo mundo, una nueva ilusión y una esperanza. ¿Quién es más compasivo, comprensivo y prudente que una madre?

La mujer se realiza en el bien de los hijos; si uno cae en desgracia, la madre es quién más sufre; si va a la cárcel, la prisión es para el corazón de la que lo dio a luz; si logra un éxito, la felicidad es mayor para la mamá, aunque nada diga.

Una vida pasa a ser un simple ensayo de vivencias cuando una mujer protectora estuvo contigo, de lo contrario son verdaderas, dolorosas y dramáticas experiencias como las expresadas en "Yo sé porque canta el pájaro enjaulado" de Maya Angelou quien expresa a todo rigor su vida como niña en Arkansas.

Esperando sea recibido como tributo a las mujeres, especialmente a las madres.

Moises Zepeda Gomez. / Para Horizontes



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