Después de la dichosa reforma al artículo 27 constitucional promulgada por el entonces presidente de nuestra República mexicana el innombrable Salinas de Gortari en él año de 1993 privatizando el campo mexicano, el futuro de los campesinos de nuestro país cada día se mira más y más incierto pues a pesar de los diferentes apoyos gubernamentales como el PROCAMPO entre otros, solo aligeraron en parte las múltiples necesidades que nuestro campo y quienes lo trabajan tienen, continuando igual o peor de jodidos como hace 50 años.
Un ejemplo de lo anterior lo tenemos precisamente en casa, ya que de los 5 ejidos con los que cuenta nuestro municipio de Sayula, muy poco o nada hacen los campesinos para organizarse y conservar su valioso patrimonio como es la tierra, la mayoría continúan trabajando solos y su alma, malbaratando sus productos a los acaparadores, rentando sus tierras a compañías trasnacionales o de plano vendiendo algo que no les costó un solo peso cuando se repartieron las tierras en nuestro país después de la revolución mexicana la cual costo un millón de vidas. La verdad que son pocas las personas que valoran el sacrificio de sus antepasados y buscan afanosamente otras alternativas para producir mejor y sobre todo conservar sus parcelas.
Gran culpa de todo lo anterior la tienen y han tenido quienes en su momento representan a las diferentes organizaciones ejidales como presidentes del comisariado pues muy poco o nada haces por organizar a su gente innovando cual buen dirigente mirando el futuro de sus ejidos. Simplemente las mesas directivas ya instaladas en el cargo, se consuelan con sacar alguna ganancia económica con las compra venta de tierras entre sus miembros o algún apoyo gubernamental el cual nunca llega a su destino pues por lo regular se queda en gastos de "representación" o alguna pachanga entre ellos mismos.
Actualmente nuestro municipio se encuentra en grave situación sobre el derecho al agua, ya que a consecuencia de la gran demanda del vital líquido para las diferentes empresas agrícolas asentadas en este lugar, los campesinos locales de un tiempo a la fecha solo tienen asignada una cierta cantidad de agua al año y cuidadito si no cumples con las nuevas normas de la CONAGUA. Todo esto pasa por la sencilla razón de que los ejidos dormidos en sus laureles desorganizados no se unifican para protestar ante quien corresponda defendiendo su derecho al agua al ser ellos los principales dueños de origen.
Se tiene que dar un golpe al arado como decía mi padre, si no se quiere perder todo lo ganado a costa de muchas vidas, pues de continuar como hasta ahora, terminaran los campesinos dependiendo de los terratenientes al entregar las tierras al mejor postor por unos cuantos pesos que duraran a lo más unos cuantos años y después vendrá de nuevo la pobreza ya que los Emiliano Zapatas Y Franciscos Villas ya no existen para que les den más tierras gratis de nuevo. Se dice que golpes quitan tonteras, pero lo que en nuestro municipio está pasando desafortunadamente con los campesinos, al parecer no les cae el veinte, pues aparte de racionarles el agua a los productores locales y no hacer nada, se están contaminando con tanto agroquímico letal que minara irremediablemente la salud de todos los que aquí habitamos tarde que temprano con diferentes enfermedades difíciles de curar como el maldito cáncer que ya se ha llevado a un buen número de personas aquí en Usmajac precisamente y ninguna autoridad a dicho esta boca es mía.
El ejido Sayula este próximo domingo 18 del presente mes tendrá cambio de mesa directiva donde su gente tendrá que elegir muy bien a sus nuevos representantes pues de continuar como hasta ahora estancado y de reversa, sabrá Dios cuanto durara su permanencia con institución campesina.
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