Las remesas, fortaleza de la economía nacional.
Por Arturo Fernández Ramírez
64 mil 745 millones de dólares, que representan alrededor del 4 % del Producto Interno Bruto (PIB) de México, se recibieron en 2024 de remesas de las y los mexicanos que viven en Estados Unidos. Lo que nos da una idea clara de lo que realmente significan en la economía de nuestro país. Y en particular para miles de familias cuyas necesidades básicas dependen de dichos ingresos. Por eso, es importante reconocer el esfuerzo y sacrificio que hacen quienes trabajan allá y mandan parte de su dinero a nuestro país. Nuestras autoridades tienen que garantizarles estabilidad y certidumbre en su patrimonio.
Las remesas que provienen de Estados Unidos, se han convertido en una de las principales fuentes de ingresos externos del país. Consolidando su importancia en el desarrollo nacional. Cuando aumentan, la economía de México fluye más y coadyuva a mejorar las condiciones de vida de miles de familias. Por el contrario, al disminuir, se afecta el dinero circulante y sectores específicos.
Se considera que, de los 11 millones de indocumentados en Estados Unidos, los mexicanos son cerca de la mitad. Y sus remesas que envían, son destinadas principalmente a comida, materiales de construcción y compra de granos como el maíz, frijol y azúcar. Es decir, se trata del sustento básico de miles de familias.
A nivel nacional, Chiapas, es la entidad federativa líder en estos ingresos, ya que las remesas representan casi el 16% de su Producto Interior Bruto (PIB). Mientras que, en el ámbito municipal, San Cristóbal de Las Casas, ocupa el primer lugar en México. Con casi 950 millones del récord de 64 mil 745 millones de dólares que percibió el país en 2024.
Lo anterior de acuerdo a los datos del Banco de México (Banxico). Quien, además, reporta que las remesas de este año representan un aumento del 2.3 % respecto al anterior. Esto es, cada año han ido creciendo estos ingresos. Lo que de alguna forma nos dice la importancia y dependencia que tenemos del trabajo de las y los mexicanos que radican en Estados Unidos.
El 99 % de los envíos, es realizado en forma electrónica. Evidenciando la creciente digitalización de los servicios financieros. Y, que, si bien se hacen para evitar que sean robados en el trayecto. La realidad es que nuestras autoridades tienen que trabajar para poner fin a los abusos y cobros excesivos de las empresas e instituciones que ofrecen los servicios de transferencia de las remesas.
Debemos reconocer el esfuerzo y sacrificio que hacen quienes trabajan allá y mandan parte de su dinero a nuestro país. Primero, dejan a sus familias, segundo, se endeudan para costear su viaje, tercero, se privan de muchas cosas con el fin de ahorrar y poder enviar a México las remesas. Por eso, es importante que nuestras autoridades les garanticen estabilidad y certidumbre en el patrimonio que poco a poco van construyendo.
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