Por Arturo Fernández Ramírez
En días pasados la Suprema Corte de Justicia de la Nación, máximo órgano jurisdiccional en nuestro país, determinó que los delitos que se cometan en contra de quienes ejerzan el periodismo, serán competencia de los tribunales federales y no de los del fuero común. A continuación me permito transcribir el Boletín que al respecto se emitió:
"El 1 de marzo de 2017, al resolver el amparo en revisión 1422/2015, la Primera Sala de la Suprema Corte determinó que son los jueces federales y no los locales quienes deben enjuiciar los delitos cometidos en contra de un periodista. La decisión supone un avance importante en la protección de los derechos de los periodistas, quienes pueden sufrir abusos en el ejercicio de su libertad de expresión e información.
En el caso, una persona solicitó que las agresiones que considera haber sufrido a manos de las autoridades municipales de Seyé, Yucatán, en el desempeño de su labor periodística, fueran juzgadas en instancias federales. Sin embargo, le fue negada esta petición porque no acreditó trabajar para algún medio de comunicación. En consecuencia, la víctima promovió juicio de amparo impugnando esta decisión.
La Primera Sala, a propuesta del Ministro Arturo Zaldívar, consideró que cualquier definición del término periodista debe partir del contexto de inseguridad que enfrentan los comunicadores en el ejercicio de su actividad. Por lo tanto, los mecanismos de protección de periodistas deben incorporar a todos aquellos que, de alguna manera, cumplan con la función de informar a la sociedad. De igual manera, se consideró patente la necesidad de tomar en cuenta los distintos y cambiantes modos con los que se ejerce el periodismo.
Así, se determinó que no es necesario que una persona acredite trabajar para algún medio de comunicación, o que presente un título profesional para justificar su carácter de periodista. La Sala tomó en cuenta que los periodistas pueden ejercer sus funciones mediante una gran diversidad de canales de comunicación (privados o públicos; impresos o radioeléctricos; digitales o de imagen), que pueden desempeñar su tarea de manera independiente o asociada, y de forma permanente o habitual. Esto es, que el periodismo debe calificarse desde una perspectiva funcional, atendiendo a las actividades que comprende y al propósito al que sirve: informar a la sociedad.
En ese sentido, la Primera Sala determinó que la víctima desempeña regularmente funciones periodísticas, y en consecuencia, revocó el fallo del Tribunal Unitario, para que las acusaciones del periodista sean enjuiciadas en tribunales federales."
Como podemos apreciar con total claridad, dos avances importantes a favor de los periodistas, uno, que sus juicios sean resueltos por las instancias federales, y dos, que para acceder la protección federal, no es necesario que una persona acredite trabajar para algún medio de comunicación, o que presente un título profesional para justificar su carácter de periodista.
Lo anterior porque se reconoce que los periodistas pueden ejercer sus funciones mediante una gran diversidad de canales de comunicación (privados o públicos; impresos o radioeléctricos; digitales o de imagen), que pueden desempeñar su tarea de manera independiente o asociada, y de forma permanente o habitual. Esto es, que el periodismo debe calificarse desde una perspectiva funcional, atendiendo a las actividades que comprende y al propósito al que sirve: informar a la sociedad.
Indudablemente que el anterior criterio sienta un gran precedente a favor de la libertad de expresión en un concepto amplio, ya que no es requisito acreditar que se trabaja para un periódico o que se tiene un título de periodista, sino que basta con que hagamos uso del derecho constitucional de libertad de expresión para que podamos ser protegidos en caso de agresiones por parte de las autoridades.
Esperemos entonces que esto coadyuve a un mayor respeto a la libertad de expresión y que esta sirva para que nuestra sociedad sea cada día mejor informada de lo que realmente debe saber pero que muchas veces por temor a represalias, no se divulga. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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