Semanario Horizontes

Tribuna para reflexionar
Por J. Ventura Torres
Es muy de seguro que cuando el rio suena es porque agua trae, y es el caso de lo que se comenta por todo lo largo y ancho de Sayula, Jalisco, que el Presidente Municipal, directores, y todo el Ayuntamiento desconocen sus obligaciones y funciones que por Ley les corresponden., Tienen la administración pública municipal convertida en una empresa familiar, con la complacencia del Congreso y del Gobierno del Estado, así como las instituciones que deben de velar para que los Ayuntamientos se apeguen a los ordenamientos de la Ley del Gobierno y la Administración Publica Municipal del Estado de Jalisco.
Es muy notorio observar y en ocasiones vivir las incongruencias violatorias del primer mandatario municipal Jorge Campos Aguilar, se le hizo costumbre nulificar las funciones del Síndico y del Secretario, así como ceder actos ejecutivos a cualquier empleado, los primeros por conveniencia aceptan y se hacen los desentendidos, el Contralor Interno en vez de hacer sus funciones, ya que en primer término entre otras son las de cuidar que no haya desvíos económicos  de las arcas municipales, sin embargo este hace las veces del Presidente Municipal según se tiene conocimiento con un poder verbal, sin tomar en cuenta la decisión de los Regidores, ya que en reunión de cabildo se debe de dar a conocer el motivo, o presentar alguna solicitud porque se ausentara de su cargo, y por ordenamiento de Ley es en reunión de Cabildo quienes deben de aprobar quien será el sustituto., Pero las funciones de Ejecutivo son únicamente y exclusivamente del Presidente Municipal y no debe dar poder verbal para que lo suplan en sus funciones, ya que es un hecho cotidiano que  cualquier empleado hace las funciones  del ejecutivo y firma documentación oficial sin señalar que firma por poder de quien debe de dar las órdenes ejecutivas, pareciera que el  Ayuntamiento está integrado con varios presidentitos.
Esto sale a colisión en virtud de que tengo en mi poder fotocopia de un oficio suscrito por el Presidente Municipal Jorge Campos Aguilar, en donde señala que le delega funciones y facultades al abogado Omar Ponce Covarrubias, porque este ha coordinado una campaña de cobro a los usuarios del Servicio de agua potable y alcantarillado. Pero no señala quien le aprobó esa campaña misma que en la práctica resulta violatoria y anticonstitucional, estas actuaciones las realizan con abuso de autoridad y prepotencia, ya que un montón de empleados sin capacitar se dieron a la tarea de andar haciendo actos de molestia sin orden de autoridad competente que funde y motive la causa legal del procedimiento como lo señala el artículo 16 de la Constitución Política de Los Estados Unidos Mexicanos.
Sin embargo una vez que  se puso en práctica dicha coordinación de cobro, para exigir el pago por medio de un oficio de ejecución firmado por el contralor de marras sin ser autoridad, este le da órdenes al inspector de aguas potables para que al estilo de algunos abogados. Este se presenta en el domicilio acompañado de la policía para asustar al deudor del agua potable exigiendo el pago o si no lo hace en ese momento le corta el servicio de agua, y si él deudor se opone a que le corten el servicio, este ejecutor tiene la orden de que  la persona sea  privada de su libertad como si se tratara de un delincuente de alta peligrosidad.  Sin orden de autoridad competente que funde y motive la causa legal de su detención. Todas estas actuaciones erráticas nos dan a pensar que el ejecutivo municipal Jorge Campos Aguilar, carece de la sabiduría que tanto pregonó en campaña, es muy de seguro que desconoce que existen acuerdos internacionales Y DE LAS NACIONES UNIDAS que señalan que el Estado tiene la obligación de proveer  de agua potable a sus habitantes EN FORMA GRATUITA, considerando suficiente y continua para uso personal entre 50 y 100 litros diarios  por persona, incluyendo que esta sea para uso doméstico. Estos usos incluyen de forma general el agua de beber, el saneamiento personal, el agua para realizar la comida, la preparación de alimentos, la limpieza del hogar y la higiene personal.
Sin embargo todo mundo estamos acostumbrados a pagar un impuesto por el servicio del agua y alcantarillado, pero ningún  gobernante le da a conocer estos acuerdos internacionales a su pueblo en virtud de que se les disminuye la fuente económica para  desviar recursos del erario municipal.