Después de casi un mes que la madre naturaleza nos mantuvo al borde del precipicio con tanta resequedad en toda la región, este pasado 15, 16 y 17 por la madrugada del presente mes nuevamente la bendita agua se dejó caer de manera inesperada en nuestro municipio dando un gran alivio a quien tienen sus sembradíos de temporal, dando un gran respiro dentro de lo económico también a los agricultores que tienen sus equipos de riego pues aparte del esfuerzo de regar cuando la milpa ya está demasiado grande, los costos en mano de obra y energía eléctrica se incrementan de gran manera. La verdad que ya no sabemos a quién en realidad echarle la culpa del descontrol climático que nos está afectando de manera criminal en la región, si a los aguacateros que valiéndoles todo lo que la sociedad diga, no paran de lanzan sus estruendosos cohetes cuando comienza a querer llover y durante las tormentas, al cambio climático del cual todos somos responsables y no hacemos nada para contrarrestarlo, a la deforestación en todo el país incluido nuestro municipio de Sayula o a quienes irresponsablemente tiran de manera exagerada durante cualquier festividad religiosa o civil cohetes hechos de pólvora provocando más males que beneficios con dicha actividad que no pocos ya están hartos de tanto insoportable trueno principalmente durante las madrugadas cuando el sueño es más placentero.
Aparte de todo lo anterior, nuestro municipio si usted se fija estimado lector desde las alturas de cualquier montaña que nos rodea, una gran cantidad de manchas blancas principalmente de plástico son las que cubren cientos de hectáreas de los invernaderos de frambuesa y otro tipo de cultivos protegidos contribuyendo con ello al sobre calentamiento natural que de por si la playa seca al oriente de la ciudad provoca naturalmente pues son miles y miles de hectáreas salinas que cuando el sol del mediodía se encuentra en lo más alto del zenit, desprende demasiado calor a la atmosfera evitando que las nubes dejen caer su bendita carga por tal efecto. A juicio de muchos, todo lo que el hombre hace o deje de hacer nos afecta, en primer lugar porque la mayoría de los males son provocados por la ambición desmedida de gente si escrúpulos que no mira más allá de sus propios interés dejando indefensos a las mayorías por lograr sus propósitos. En segundo lugar tenemos que hacer algo para remediar todos los males provocados y los que pudieran estar en puerta no muy lejos como ha estado pasando en otros lugares donde el agua ha provocado infinidad de desgracias y pérdidas materiales dejando a la pobre gente en la calle.
Si en nuestro municipio miramos que X situación nos está afectando, hagamos algo tan simple como dejar de tirar cohetes o contaminar lo menos posible nuestro aire o nuestra agua. Levantar la vos ante quien corresponda para que se prohíban de una vez los dichosos cañones antigranizo antes de que la misma gente tome cartas en el asunto directamente emeorando la situación. Se puede exigir a las autoridades municipales o por medio de las mismas a quien corresponda, una exhaustiva investigación sobre el efecto invernadero que los nuevos rectractores (invernaderos) del sol están provocando con tanto plástico en relación con el escás de lluvia hoy día. Todo tiene una explicación científica y merecemos saber que efectos provoca tanto plástico en los campos de cultivo antes retenedores naturales del agua de lluvia. Ya que de permanecer indiferentes como hasta el día de hoy muchos lo hacen, continuaremos sufriendo las consecuencias de nuestra apatía donde el clima continuara cada año más inestable y sobre tos más brusco con consecuencia de pronósticos reservados para todos por igual no importa que usted o usted estimado lector no tenga tierra o no tire cohetes siquiera cuando celebran a su "santito" de su barrio.
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