Esperando que no sea nomás una acción distractora, personal de la Fiscalía General apoyó un operativo que implementaron autoridades de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, PROFEPA, para combatir la tala clandestina de árboles en el municipio de Tapalpa, resultando un aserradero clausurado y en otro inmueble se aseguró madera por no contar con documentación que avale su legal procedencia.
Inspectores de la PROFEPA revisaron patios de acopio, centros de almacenamiento y transformación de materias primas forestales en dos sitios ubicados en la población de Juanacatlán, con apoyo de los elementos de la Fuerza Única Regional.
El primer lugar supervisado fue una parcela ubicada en carretera La Frontera - Atemajac de Brizuela, a la altura del kilómetro 10.5, donde se clausuraron 287 metros de madera de pino en corte de rollo de pequeñas dimensiones, por no presentar la documentación que avale su legal procedencia.
Posteriormente, se revisó un aserradero ubicado en Ferrería de Tula, mismo que fue clausurado debido a que no contaba con los permisos para su legal operación. En el interior, se encontraron 121 metros cúbicos en rollo y rollito de pino, 45 metros cúbicos de madera aserrada de pino y 10 maquinarias de corte.
Lo extraño es que durante este operativo no hubo personas detenidas, decimos extraño porque ¿a poco toda esa madera y en general el aserradero estaba vacío..?
Igual con los registros de propiedad se puede dar con los dueños de los predios si es que en verdad quieren aprehender a los responsables. Y ya entrados, por el rumbo del sur de Jalisco, existen no uno, sino varios aserraderos que se presume estarían en iguales condiciones en el sentido de contar y procesar madera proveniente de tala clandestina. Dicen los rumores que uno de los dueños o él mismo lo sería, de uno o varios de los aserraderos del sur de Jalisco, es el ex gobernador Alberto Cárdenas Jiménez, de ahí que si existe impunidad ya sabemos entonces de qué lado batean las autoridades.
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