jueves, 4 de abril de 2013


Temas de Interés
Por Arturo Fernández Ramírez
Alarma inseguridad que padecemos

Los hechos sangrientos que de manera reiterada son publicados por los diversos medios de información masiva de nuestro municipio y de la región, dejan en claro que la inseguridad pública lejos de disminuir sigue creciendo.
Y estamos hablando de una inseguridad pública que es consecuencia de la desintegración social y de la delincuencia organizada, ya que así como se cometen robos a casas habitación, a personas en lo individual y a su patrimonio, también se cometen homicidios en forma por demás sangrienta presumiblemente por la delincuencia organizada.
Además, nuestro municipio ha sido foco de atención a nivel nacional por ser "tiradero" de cuerpos sin vida, es decir, dentro del espacio geográfico de Sayula es común que se tiren cuerpos de personas que fueron asesinadas, algunas han resultado ser de aquí mismo pero otras han sido desconocidas.
Todo lo anterior por supuesto que genera un verdadero estado de zozobra en todos nosotros sin excepción, ya que todos estamos expuestos a ser víctimas de la delincuencia.
Las medidas que en materia de seguridad se han tomado han sido insuficientes, no solo a nivel municipal, sino a nivel estatal y federal.
Se ha dicho que nuestro municipio se ve protegido por la presencia de la instalación militar aquí asentada. El 9° Batallón de Infantería del Ejército Mexicano de alguna manera inhibe que crezca más la delincuencia e inseguridad en nuestro municipio, pero aun así, vemos con desesperación que no se revierten los índices delictivos.
Creo que es importante una mayor coordinación y mejores esfuerzos por parte de nuestras autoridades municipales, estatales y federales para frenar la inseguridad.
Es cierto que la sociedad debe ser activa, pero con todo y eso, frente al tipo de delincuencia que vivimos en donde sobresale la violencia y las armas de fuego como parte del modus operandi, estamos totalmente indefensos y es necesario que las autoridades nos brinden la protección que requerimos y a la que indefectiblemente tenemos derecho.
Ojala que nuestras autoridades realmente hicieran un esfuerzo mayor para que nos garanticen un mínimo de seguridad pública, no es posible seguir viviendo así, como tampoco es posible permitir que siga creciendo todavía más este estado de zozobra que padecemos. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com


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