Por Rodrigo Carrión Grajeda
Este pasado jueves primer día del mes de Septiembre alrededor de las 3 p.m. Usmajac fue gravemente azotado por una tremenda tromba en que sus fuertes viento y una gran cantidad de agua que en muy pocos minutos Usmajac se convirtió en una gigantesca alberca causando innumerables destrozos en casas habitación principalmente en zonas bajas donde el agua alcanzo hasta un metro de altura arrastrando todo a su paso. Más de una hora duro la fuerte tormenta estacionada en el mismo lugar, tiempo más que suficiente para inundar toda la población sorprendiendo a los pobladores ya que la mayoría de usmajenses principalmente la gente joven o de mediana edad, jamás habían presenciado semejante fenómeno provocada por la madre naturaleza como ese día.
Bastantes fueron las casas afectadas en todo Usmajac dentro de sus bienes materiales, animales domésticos arrastrados por el agua, árboles caídos, gente que por pretender cruzar los arroyos fueron arrastradas varios metros por las fuertes corrientes, carros varados a causa del agua que tuvieron sus dueños que dejarlos a su suerte, bardas y techos de teja o lamina caídas por la fuerza del agua, los sembradíos también fueron afectados de gran manera, pues los fuertes vientos doblaron la milpa mucha de ella aun tierna con riesgo de mermar su sagrado producto. De todo a Usmajac le toco sufrir en esta ocasión con este inusual vendaval que si dure otra hora más, sabrá Dios lo que hubiera pasado con esta delegación.
Afortunadamente los cuerpos de seguridad principalmente protección civil al mando de jefe en turno Felipe Ojeda Flores estuvieron auxiliando a la población en todo lo que su capacidad les permitió, pues hubo momentos que se vieron rebasados para atender todas las emergencias durante y después de la tremenda tormenta. También tenemos que reconocer la oportuna intervención de rescate y auxilio para con los habitantes de Usmajac, de la policía del Estado quienes sin reparar de que no contaban con impermeables o equipo especial para protegerse del agua, le entraron con todo y sus camionetas rescatando gente de las partes más afectadas por el agua. La verdad que estuvo fea la situación a causa del fuerte aguacero, que tendrán que tomar cartas en el asunto seriamente las actuales autoridades municipales para que realicen un concienzudo y meticuloso estudio del porque Usmajac fue inundado repentinamente, pues en los más de 40 años que tengo trabajando en este lugar nunca había sucedido tal cosa como lo miramos el pasado Jueves 01 de Septiembre.
Lo digo porque, tres son los arroyos que cruzan la población, mas sin embargo fueron insuficientes para conducir la gran cantidad de agua que cayó durante la tormenta en tan solo una hora y minutos este pasado jueves, pues la todas las calles de Usmajac parecían ríos de agua la cual entraba a las casas llevándose todo a su paso. Los comentarios sobre lo anterior no han dejado de correr por varias personas principalmente mayores de edad maliciosamente, pues al parecer algunos potreros al sur de la población han sido modificados últimamente dentro de los cauces naturales del agua, provocando con ello que las corrientes tomaran rumbos diferentes con las consecuencias que hoy miramos. Y sí, pues si usted se fija estimado lector, los invernaderos a la entrada poniente de Usmajac por el camino viejo con una extensión de más de veinte héctares, dejo de consumir el agua naturalmente dentro de su terrenos, ya que sus dueños la familia Cueto, instalaron grandes y extensas infraestructuras cubiertas de plástico canalizando el agua a una hoya captadora la cual cuenta con un tubo de desagüé en uno de sus extremos que cuando llena su capacidad, derrama el agua directamente a la entrada poniente de la población, inundando el jueves pasado el centro de Usmajac cosa anteriormente nunca visto.
Por cierto en esta ocasión hasta la barda perimetral que protege dicha hoya captadora propiedad de la familia Cueto, la fuerza del el agua le echó abajo donde se cargó la fuerza del agua, no importo que esta fuera construida con pura piedra. Aparte de todo lo anterior, espero que todo en general dentro del municipio después del susto comencemos a crear conciencia muy seriamente sobre qué futuro queremos, pues de continuar indiferentes ante
La actual situación de sobrecalentamiento de nuestro planeta, este tipo de desastres continuara cada día peor donde pudiéramos lamentar pérdidas de vidas humanas, vidas que afortunadamente hoy no se perdieron gracias a Dios.
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