INICIA VIRTUAL CICLO ESCOLAR 2020-2021
Por Arturo Fernández Ramírez
Aunque la educación a distancia ha existido desde hace años, primero por correspondencia, después utilizando el internet, la realidad es que no estábamos preparados para hacerlo de manera masiva como ahora sucedió. Este lunes 24 de agosto arrancaron las clases en preescolar, primaria y secundaria. Dudas, incertidumbre, inquietud, escepticismo, es lo que prevale no solo en docentes y alumnado, también en madres y padres de familia. No es para menos, si un sistema que estaba consolidado requería de ajustes constantes, con mayor razón el que por vez primera se implementa y depende del acceso a la tecnología. Rubro en el que existe una gran desigualdad, unos sí la tienen, pero otros, no. Gran responsabilidad tienen nuestras autoridades.
Lo nuevo se convierte en una especie de experimento cuyos resultados que se desean no siempre pueden garantizarse. Es cierto que el ciclo escolar anterior concluyó también de manera virtual, pero al haber estado en su última etapa, la misma inercia ayudó a que se pudiera salir del compromiso sin tantos aspavientos. Muy diferente ahora que se trata del inicio, donde la escuela será el propio hogar, bajo la batuta de los progenitores. Y aunque en televisión hay transmisiones de las clases, no es suficiente, porque para trabajos, tareas y otras actividades, se requiere comunicación con la escuela y maestros. Siendo aquí donde la desigualdad en el alcance de la tecnología será un factor determinante en la calidad de la educación.
Es cierto que se han implementado programas gubernamentales con el fin de abatir el rezago en herramientas tecnológicas, pero hasta el momento son insuficientes para llegar a la totalidad de las y los alumnos que lo necesitan. Existe un gran rezago en muchas zonas del país, no nomás en las rurales, también en las urbanas. Familias de escasos recursos económicos no solo carecen de computadoras, también de acceso a internet, lo que complica que sus hijas e hijos estudien de manera virtual.
Además, debemos reconocer que la mayoría estamos acostumbrados a estudiar bajo la directriz de un docente, es decir, normalmente no somos autodidactas. Esto en el esquema virtual nos afectará más, porque si bien estaremos apoyados por la televisión, maestros y otras herramientas, el hecho que sea a distancia, implica que cada alumno tendrá que poner más de su parte. Pero también los progenitores tendrán que participar de manera más activa, algo que se ve complejo si tomamos en cuenta que hoy en día la mujer tiene actividades laborales fuera de su casa.
En fin, no se trata de ser pesimistas, solo de visualizar una realidad para enfrentarla de la mejor manera y no soslayarla. Las condiciones orillaron a que el inicio del ciclo escolar fuera virtual, si no estábamos preparados, debemos tomar todas las medidas necesarias tendientes a evitar que disminuya la calidad educativa. Indudablemente las autoridades tienen una gran responsabilidad, esperemos que puedan cumplirla a cabalidad. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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