Semanario Horizontes

Editorial:  UNA INDUSTRIA QUE GENERA MILLONARIOS: LA POLÍTICA

Desde tiempos inmemoriales, esta disciplina ¿o indisciplina? ha sido la veta de oro para algunos que saben vivir de venderse como soluciones a los problemas sociales, pero la realidad lo único que resuelven son sus propias dificultades económicas, y para los que no me creen, deberían preguntarle a Fox (de estar en la vil chilla, ahora está megamillonario).

Muchos saben, otros ignoran y algunos más ni les interesa entender para qué son los puestos en los gobiernos, pero lo que no les queda duda es que ahí pueden hacer grandes negocios, aunque entre las ruedas de la ambición atropellen a los ciudadanos.

¿Sabe usted cuánto nos cuesta un árbitro de elecciones como el INE? Nada más la friolera de 11 mil millones por año, haya elecciones o no. ¿Se gastará lo mismo cuando sea periodo electoral y sea necesario propagandear, capacitar, imprimir cédulas, mamparas, vehículos para logística, movilizar personas, imprimir documentos, equipar computadoras con todos los accesorios, pagar personal extra y apoyar a funcionarios de casillas, como cuando no hay elecciones? Obvio que no, tendrán un sobrante de más del 50%, como 5 mil millones que pueden gastar en "asesores" (léase aviadores, amantes, peluqueros, etc.); autos de super lujo; cirugías estéticas propias y de otras personas "cercanas" en ocasiones se las hacen en el extranjero; viajes fuera del país a todo lujo, con toda la familia (a veces con la familia de otros) y hasta con el perico y todavía les queda para ahorrar para el retiro. Si, México da para eso y más.

Pero qué decir de los honorables diputados; muchos y especialmente los plurinominales ni conocen ni son conocidos por el estado que representan. Algunos compraron la curul para gozar del fuero porque podrían ser perseguidos por la justicia y de esa manera evitan su detención y juicio; otros porque son familiares de algún "machuchón" de un partido; ejemplo Humberto Moreira, tuvo varios cargos como presidente municipal, luego gobernador y presidente del PRI, su hermano Rubén como gobernador, su esposa e hijo, todos con cargos.

Los Monreal son otro ejemplo; los Calderón con Felipe, la hermana Cocoa y la esposa Margarita; en Jalisco no hacemos mal los quesos: la familia Sandoval, el papá magistrado y el hijo presidente municipal y luego gobernador (QPD).

Lo anterior sólo es una muestra de los horrores de nuestro sistema electoral y vicios del sistema de representación, que motivaron para que haya un proyecto de ley que mejore el sistema democrático en tres áreas:

1. La imparcialidad autónoma del INE, mediante el cambio de forma de selección de consejeros y mejora en el gasto, que actualmente consume como 11 mil millones por año, se ocupe o no.

2. La reducción de diputados federales, desaparecer los plurinominales y voltear a ver a los que tengan una auténtica representatividad, aunque sean de la minoría, con eso se evita que los chambones propongan a sus compadres, hermanos y personas de dudosa conducta. Con esto tendríamos un ahorro del 30% entre las dos cámaras de aproximadamente 4 mil millones por año.

3. Los partidos políticos, que los dirigentes viven una holgura económica digna de un magnate, el lujo es su marca de vida; se transportan en los vehículos blindados con el mayor lujo, su trabajo es sólo hacer clientelismo político, estar a las órdenes del jerarca sin objetar las instrucciones para seguir pegado a la ubre presupuestal. 

Algunos de los micro partidos son "negocios" familiares, hacen la asociación, la inscriben y reciben las prebendas sin aportar absolutamente nada a la población, otros en vías de extinción llegan para poder "negociar" pagos por servicios, una prueba es el tweeter de los trabajadores del PRD que acusan a sus patrones de recibir dinero y ni tan siquiera le dan el sueldo correspondiente a su personal.

Y el problema es ese, pero más inconveniente es que con cinismo y sin consciencia cobran de nuestros impuestos, si hacemos la suma de partidos, más INE, más diputado y senadores pluris; los trabajadores y empresarios llevamos en las espaldas un gasto de más de 24 mil millones de pesos por año.

Si se hicieren escuelas de a un millón podríamos hacer 24 mil por año, eso es el desgaste.

Eso quiere corregir la reforma electoral que propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador.

¿Cree usted que la oposición acepte reducir sus canonjías, si en la Reforma Energética no dejó ir el dinero que algunos recibieron de las empresas extranjeras? ¿Juzga usted que están de acuerdo por cambiar la estructura del INE, si tal como está les sirvió en 2006 y 2012? Por supuesto que en 2018 el voto masivo de 30 millones no lo pudieron manipular, no les fue posible ocultar ni intercambiar, no les alcanzó. Esto nos permite poner en blanco y negro quiénes están dispuestos a servir al pueblo y quiénes sólo vienen por enriquecerse y proteger los intereses de sus patrones, ya sean nacionales o extranjeros. (Moisés Zepeda Gómez.)