Persiste la inseguridad pública.
Por Arturo Fernández Ramírez
A nivel nacional, 58.6 % de la población de 18 años y más, residente en 91 áreas urbanas considera que es inseguro vivir en su ciudad. Acentuándose más en Tapachula, con 91.9 %; Naucalpan de Juárez, 88.0 %; Fresnillo, 87.9 %; Ecatepec de Morelos, 87.0 %; Irapuato, 86.4 %, y Tuxtla Gutiérrez, con 85.9. En contraste, los lugares con menores porcentajes fueron San Pedro Garza García, con 13.7 %; Benito Juárez, 17.5 %; Tampico, 20.0 %; Piedras Negras, 20.2 %; Puerto Vallarta, 21.3 %, y Saltillo, 21.7 %. De Jalisco, el municipio de Tonalá fue el que mayor disminución tuvo en el trienio anterior, de 78.8 % a 60.7 %. Colocándose en el primer lugar estatal en los resultados obtenidos del rubro que aquí tratamos, por encima de Zapopan, Guadalajara, Tlajomulco, Tlaquepaque y Puerto Vallarta. Con todo y ello, debemos reconocer que hace falta mucho por hacer para que la ciudadanía pueda vivir con tranquilidad.
El pasado 21 de octubre de 2024, fue publicada la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU). Que cada trimestre realiza el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). De la que también se desprende que en cuanto a los espacios físicos específicos, el 67.3 % de la población manifestó sentirse insegura en los cajeros automáticos localizados en la vía pública; el 61.8 %, en el transporte público; el 53.0 %, en la carretera; y, 51.3 %, en las calles que habitualmente usa y en el banco.
Sobre la expectativa de la delincuencia e inseguridad en los próximos 12 meses, el 31.8 % consideró que la situación seguirá igual de mal. Mientras que el 20.0 % refirió que va a empeorar. En contraste, 18.9 % dijo que seguirá igual de bien; y, 27.7 % manifestó que mejorará. Lo que se traduce en una gran desconfianza ciudadana hacia las autoridades en la solución de esta problemática.
En cuanto al desempeño de las instituciones de seguridad pública en sus labores para prevenir y combatir la delincuencia, la Marina tuvo el 87.7 %; la Fuerza Aérea Mexicana, 83.9 %; el Ejército, 83.1 %; Guardia Nacional, 73.5 %; policía estatal, 55.8 %, y la municipal, 48.6 $. Sin pretender justificar a esta última, debemos entender que al ser la de mayor proximidad social (realiza más del 90% de las detenciones), es normal que tenga un mayor desgaste con la ciudadanía.
Se debe trabajar en el combate a la corrupción de las corporaciones de seguridad pública. Ya que es común que en algunos municipios, se le tenga más miedo a los policías que a la propia delincuencia. Aunado a los actos de extorsión que realizan, es decir, muchos elementos andan patrullando para ver a quién le pueden sacar dinero. Olvidándose por completo de su función de cuidar y proteger.
Y en general, se debe seguir trabajando en mejorar la seguridad pública, ya que si bien se reflejan algunos avances. La realidad es que hace falta mucho para que se considere plenamente cumplido el derecho humano de salvaguardar la vida, las libertades, la integridad y el patrimonio de las personas. Así como contribuir a la generación y preservación del orden público y la paz social.
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