Semanario Horizontes

 Día de muertos: honrar, identidad y economía.

Por Arturo Fernández Ramírez

Honramos a quienes ya partieron de este mundo; mantenemos viva una tradición prehispánica; fortalecemos nuestra cultura; respetamos la libertad del culto religioso; y, generamos una gran derrama económica. Estimada este año a nivel nacional en 49 mil 500 millones de pesos, que es un 9.2 % mayor con respecto a 2024. Todo esto y más, es lo que representa el Día de Muertos que celebramos el 02 de noviembre, cuyos festejos inician con antelación. Participemos en los mismos para fortalecer sus rituales y la tradición que nos da identidad y sentido de pertenencia.

        Todas y todos hemos sufrido la pérdida de un familiar o amistad cercana, que nos ha dolido y que, a nuestro juicio, merece que mantengamos vivo su recuerdo. Quienes profesamos la religión católica, tenemos la creencia de que existe otra vida posterior a la muerte. Y, que, seremos juzgados por nuestros actos, para pasar la eternidad en el cielo, infierno o purgatorio. Para salir de este último es necesario que quienes aún viven, pidan por nosotros. Y justo aquí es donde cobra importancia el Día de Muertos, porque podemos dedicarlo a la salvación de dichas almas.

       Para quienes son ajenos a las creencias religiosas, también es una fecha simbólica. En la que aprovechan para recordar a un ser querido y que pudo haber significado mucho. Respetándolo por lo que representó en vida y rindiéndole un homenaje en su memoria. Con lo que promueven una tradición prehispánica, que sobrevivió y fue fortalecida en la conquista española.

     De una y otra manera, todas y todos coincidimos en reconocer estas festividades como parte de nuestra cultura que nos da identidad y sentido de pertenencia. En las que se logró amalgamar tradiciones con y sin esencia religiosa, respetando los límites y creencias que cada quien quiera tener. Llevando a cabo celebraciones eucarísticas, altares, catrinas, desfiles, ferias, concursos, muestras gastronómicas, entre otros rituales.

      Aunado a lo anterior, la activación económica también está presente. La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (CONCANACO SERVYTUR) estima una derrama económica nacional de 49 mil 500 millones de pesos, que es 9.2 % mayor con respecto a 2024. Beneficiando directamente a miles de negocios familiares en todo México. Destacando el consumo de flores, pan de muerto, alimentos típicos, artículos para ofrendas, decoración, disfraces y dulces. Además, de los servicios turísticos y hoteleros, ya que muchas y muchos aprovechan para descansar y distraerse. De manera principal se fortalecen las micro, pequeñas y medianas empresas del país.

       Todo eso y más, es lo que representa el Día de Muertos que celebramos el 02 de noviembre, pero, cuyos festejos inician con antelación. Participemos en los mismos para mantener viva esta tradición prehispánica dedicada a quienes ya partieron de este mundo. Una celebración que está llena de rituales que nos dan identidad y sentido de pertenencia. Que sigan vigentes los recuerdos y la memoria de nuestros seres queridos.