Temas de Interés
Por Arturo Fernandez Ramírez
Pareciera que algunos candidatos en nuestro municipio de Sayula pretenden convencer al electorado haciendo creer que son los favoritos para ganar las elecciones, que cuentan con un amplio respaldo de la ciudadanía y para ello, se valen de supuestas encuestas.
En mi opinión, manejar las encuestas a la ligera como lo están haciendo, no todos por supuesto, pero sí mas de un candidato, no es más que una muestra inequívoca de que en realidad las cosas no están resultando como quisieran y por ello, al menos en el papel intentan colocarse en una posición que no tienen todavía ganada en el campo de batalla.
Y eso puede resultar contraproducente si al final terminan siendo presas de esas mismas encuestas, es decir, pueden caer en su mismo garlito.
Independientemente de lo anterior, bien valdría repasar lo que al efecto nos dice el extensamente denominado "Reglamento de Estudios de Opinión, Encuestas, Sondeos sobre la Intención del Voto de los Ciudadanos y Conteos Rápidos Sobre las Tendencias de la Votación el Día de la Jornada Electoral en los Procesos Electorales Locales del Estado de Jalisco" que regula precisamente la publicación de las encuestas.
Para empezar, el artículo 1º numeral 2º fracciones VI, IX y X, nos dicen que una Encuesta es el "Conjunto de preguntas normalizadas dirigidas a una muestra representativa de la población o instituciones, con el fin de conocer estados de opinión o hechos específicos". Y que Estudio de opinión es la "Información estadística obtenida mediante la aplicación de una encuesta".
Mientras que un Sondeo es la "Medición estadística sin sustento metodológico tomada a partir de reactivos destinados a conocer la opinión pública".
Es decir, una cosa es una encuesta, otra un estudio de opinión y otra diferente un sondeo. En este último no se requiere un sustento metodológico, lo que supone inferir que en los dos primeros sí se requiere.
Luego entonces, debemos tener claro cuando estamos frente a una encuesta, a un estudio de opinión y un sondeo. Y la pauta la dará el sustento metodológico que se haya utilizado para su elaboración.
Así, en primer término podemos cuestionar si las encuestas que se han manejado en algunos medios reúnen este elemento esencial metodológico. Si la respuesta es afirmativa, entonces puede ser creíble el resultado que se proporcione. Pero si no se informa el método que se aplicó, no se puede hablar de una encuesta ni de un muestreo que refleje una realidad. Por eso sostengo que pretender utilizar la palabra encuesta en un trabajo carente del método científico, es una muestra inequívoca de que la realidad es inversa a la que intentan infundir en el electorado.
Dicho en otras palabras, recurrir a este tipo de "encuestas" no es más que una estrategia de quien en realidad sabe que no es puntero en la preferencia electoral y por eso necesita de estas argucias.
Por otro lado, en el artículo 2º numeral 1, se establece que "A partir del inicio del proceso electoral local, y a más tardar con diez días de anticipación a la jornada electoral, toda empresa u organismo que pretenda publicar estudios de opinión, encuestas sobre la intención del voto de los ciudadanos, sondeos, o conteos rápidos sobre las tendencias de la votación el día de la jornada electoral, deberá presentar previamente solicitud ante el Secretario, en los formatos aprobados por el Instituto."
Se ocupa entonces una autorización para poder publicar encuestas, de lo contrario se estará vulnerando la ley.
En el resto del articulado del Reglamento que comentamos, se fijan los requisitos para la publicación de las encuestas o sondeos de opinión, que bien valdría la pena estudiar para no incurrir tampoco en responsabilidades por omitir las exigencias legales.
En fin, no debemos dejarnos engañar por informes manipulados al antojo de un partido o candidato que sabiéndose abajo en la preferencia electoral, quiere falsear la realidad en el papel. Aunque a la postre, de poco o nada servirá tal manipulación porque la encuesta final la harán los propios ciudadanos que de manera responsable acudan a cumplir con su debe cívico de votar. Esperemos entonces el resultado de esta encuesta. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
En mi opinión, manejar las encuestas a la ligera como lo están haciendo, no todos por supuesto, pero sí mas de un candidato, no es más que una muestra inequívoca de que en realidad las cosas no están resultando como quisieran y por ello, al menos en el papel intentan colocarse en una posición que no tienen todavía ganada en el campo de batalla.
Y eso puede resultar contraproducente si al final terminan siendo presas de esas mismas encuestas, es decir, pueden caer en su mismo garlito.
Independientemente de lo anterior, bien valdría repasar lo que al efecto nos dice el extensamente denominado "Reglamento de Estudios de Opinión, Encuestas, Sondeos sobre la Intención del Voto de los Ciudadanos y Conteos Rápidos Sobre las Tendencias de la Votación el Día de la Jornada Electoral en los Procesos Electorales Locales del Estado de Jalisco" que regula precisamente la publicación de las encuestas.
Para empezar, el artículo 1º numeral 2º fracciones VI, IX y X, nos dicen que una Encuesta es el "Conjunto de preguntas normalizadas dirigidas a una muestra representativa de la población o instituciones, con el fin de conocer estados de opinión o hechos específicos". Y que Estudio de opinión es la "Información estadística obtenida mediante la aplicación de una encuesta".
Mientras que un Sondeo es la "Medición estadística sin sustento metodológico tomada a partir de reactivos destinados a conocer la opinión pública".
Es decir, una cosa es una encuesta, otra un estudio de opinión y otra diferente un sondeo. En este último no se requiere un sustento metodológico, lo que supone inferir que en los dos primeros sí se requiere.
Luego entonces, debemos tener claro cuando estamos frente a una encuesta, a un estudio de opinión y un sondeo. Y la pauta la dará el sustento metodológico que se haya utilizado para su elaboración.
Así, en primer término podemos cuestionar si las encuestas que se han manejado en algunos medios reúnen este elemento esencial metodológico. Si la respuesta es afirmativa, entonces puede ser creíble el resultado que se proporcione. Pero si no se informa el método que se aplicó, no se puede hablar de una encuesta ni de un muestreo que refleje una realidad. Por eso sostengo que pretender utilizar la palabra encuesta en un trabajo carente del método científico, es una muestra inequívoca de que la realidad es inversa a la que intentan infundir en el electorado.
Dicho en otras palabras, recurrir a este tipo de "encuestas" no es más que una estrategia de quien en realidad sabe que no es puntero en la preferencia electoral y por eso necesita de estas argucias.
Por otro lado, en el artículo 2º numeral 1, se establece que "A partir del inicio del proceso electoral local, y a más tardar con diez días de anticipación a la jornada electoral, toda empresa u organismo que pretenda publicar estudios de opinión, encuestas sobre la intención del voto de los ciudadanos, sondeos, o conteos rápidos sobre las tendencias de la votación el día de la jornada electoral, deberá presentar previamente solicitud ante el Secretario, en los formatos aprobados por el Instituto."
Se ocupa entonces una autorización para poder publicar encuestas, de lo contrario se estará vulnerando la ley.
En el resto del articulado del Reglamento que comentamos, se fijan los requisitos para la publicación de las encuestas o sondeos de opinión, que bien valdría la pena estudiar para no incurrir tampoco en responsabilidades por omitir las exigencias legales.
En fin, no debemos dejarnos engañar por informes manipulados al antojo de un partido o candidato que sabiéndose abajo en la preferencia electoral, quiere falsear la realidad en el papel. Aunque a la postre, de poco o nada servirá tal manipulación porque la encuesta final la harán los propios ciudadanos que de manera responsable acudan a cumplir con su debe cívico de votar. Esperemos entonces el resultado de esta encuesta. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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