Y vuelve la burra al trigo
Por Rodrigo Carrión Grajeda
Después de que los 6 competidores han recorrido arduamente un poco mas de un tercio de la pista, y que los espectadores presentes empiezan ha analizar que ninguno de ellos goza de total simpatía por una cosa, o por otra, las cosas por si solas se empiezan a ponerse color de hormiga.
Pues al no sentirse del todo seguro la gente de los punteros, mucho menos los rezagados el nerviosismo natural que provoca este tipo de competencias empieza a hacer lo suyo. Y no es para menos.
Ya que por el simple hecho de encontrarse dentro de la carrera los organizadores tuvieron que invertir tiempo, dinero y esfuerzo en su preparación, y no querrán perder su lugar así, como así, mucho menos el anhelado triunfo.
Mas sin embargo, la calma tendrá que prevalecer y utilizarla como una de sus mejores estrategias, pues de lo contrario la desesperación pudiera llevarlos a un fracaso anticipado.
Esto es por fuera, ya que dentro de la pista, pese a que los competidores hacen su mejor esfuerzo y alguna que otra "marimaña "por sacarles puntos a sus contrincantes y colocarse como favorito, la sombra de la desconfianza no deja de perseguirlos por razones obvias que ya todos conocemos.
Razón de sobra para que los competidores busquen nuevas formulas de ganar terreno devolviéndole la confianza al público presente quien a resumidas cuentas siempre tendrá la razón.
Por ejemplo La única yegua dentro de la carrera al parecer por ser hembra, y que no ha aflojado el paso desde un principio entre los punteros esta despertando fuerte interés entre los presentes gracias a su valentía de enfrentarse cara a cara con rivales de sobrada experiencia colocándola según varias opiniones entre los dos mejores en estos momentos.
El potro galante tampoco se queda atrás, pues también tiene lo suyo y lo demuestra con su carrera muy seguro de lo que hace al grado que los presentes ya lo identificar entre los intermedios después de que arrancara en último lugar.
Las novedades siempre serán novedades y más cuando se trata de competencias de este tipo. Pues los espectadores por naturaleza serán curiosos y ávidos de experimentar cosas nuevas.
Esperemos pues que en esta ocasión debido a experiencias pasadas no volvamos ha equivocarnos de nuevo apostándole al caballo equivocado echando por la borda otro tres años mas de nuestro bienestar al perder en apuestas fraudulentas donde los únicos ganadores siempre serán los dueños de las cuadras. Imaginase estimado lector si el dia de mañana por razones x el publico dejara de asistir a este tipo de carreras desilusionado nuevamente de los resultados aunque en esta ocasión gane un caballo de diferente cuadra. Si ya de por si es escasa la presencia en las graderías.
Pues al no sentirse del todo seguro la gente de los punteros, mucho menos los rezagados el nerviosismo natural que provoca este tipo de competencias empieza a hacer lo suyo. Y no es para menos.
Ya que por el simple hecho de encontrarse dentro de la carrera los organizadores tuvieron que invertir tiempo, dinero y esfuerzo en su preparación, y no querrán perder su lugar así, como así, mucho menos el anhelado triunfo.
Mas sin embargo, la calma tendrá que prevalecer y utilizarla como una de sus mejores estrategias, pues de lo contrario la desesperación pudiera llevarlos a un fracaso anticipado.
Esto es por fuera, ya que dentro de la pista, pese a que los competidores hacen su mejor esfuerzo y alguna que otra "marimaña "por sacarles puntos a sus contrincantes y colocarse como favorito, la sombra de la desconfianza no deja de perseguirlos por razones obvias que ya todos conocemos.
Razón de sobra para que los competidores busquen nuevas formulas de ganar terreno devolviéndole la confianza al público presente quien a resumidas cuentas siempre tendrá la razón.
Por ejemplo La única yegua dentro de la carrera al parecer por ser hembra, y que no ha aflojado el paso desde un principio entre los punteros esta despertando fuerte interés entre los presentes gracias a su valentía de enfrentarse cara a cara con rivales de sobrada experiencia colocándola según varias opiniones entre los dos mejores en estos momentos.
El potro galante tampoco se queda atrás, pues también tiene lo suyo y lo demuestra con su carrera muy seguro de lo que hace al grado que los presentes ya lo identificar entre los intermedios después de que arrancara en último lugar.
Las novedades siempre serán novedades y más cuando se trata de competencias de este tipo. Pues los espectadores por naturaleza serán curiosos y ávidos de experimentar cosas nuevas.
Esperemos pues que en esta ocasión debido a experiencias pasadas no volvamos ha equivocarnos de nuevo apostándole al caballo equivocado echando por la borda otro tres años mas de nuestro bienestar al perder en apuestas fraudulentas donde los únicos ganadores siempre serán los dueños de las cuadras. Imaginase estimado lector si el dia de mañana por razones x el publico dejara de asistir a este tipo de carreras desilusionado nuevamente de los resultados aunque en esta ocasión gane un caballo de diferente cuadra. Si ya de por si es escasa la presencia en las graderías.
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