Semanario Horizontes

Sayula naufraga en el olvido histórico, la ineptitud y la ignorancia

Por Federico Estrada y Valera Greess, Cronista de la ciudad

Si los niños y jóvenes de Sayula y Usmajac, supieran que su población fue la primera que creó e hizo producir a la primera hacienda del occidente del país (Usmajac) y que de aquí partieron los primeros colonizadores y evangelizadores del norte de México, (Coahuila y Nuevo León), seguramente estarían orgullosos de su tierra.
Pero así fué : Usmajac fue el asiento primigenio de la Antigua Provincia de Avalos -y fué- Andrés de Urdaneta, gran navegante, estratega militar de Carlos V en Italia, constructor de barvos, y el precursos de las fortificaciones navales en las costas de nuestro país para combatir a los piratas ingleses, quién como -Primer Alcade Mayor de Sayula, ordenó el cambio del lugar de asentamiento de la que sería Capital de la Provincia de Avalos, de Usmajac al lugar que hoy ocupa.
Ël personalmente trazó «a cordel» la nueva ciudad, (tambieén fue el más reputado cosmógrafo de su tiempo) ordenó la construcciòn de su plaza al estilo europeo, su edificaciòn religiosa, los edificios del gobierno, tesorería, etc.
Además construyó un sistema de túneles de comunicación y defensa subterránea que solo pocas capitales de Europa poseen y que aún está en pié.
Tiempo después de haber servido en Sayula, se ordenó como sacerdote en la ciudad de México y fue maestro de novicios, entonces el Rey Felipe II le urgió para que realizara un portentoso viaje naval al oriente (Filipinas, China, Japón) y descubriera la ruta de retorno hacía América, cosa que nadie había logrado, ello dió lugar a la «nao de China» y otorgó a México un lugar de privilegio en el comercio marítimo internacional.
Con todos esos méritos, los diversos ayuntamientos a los que he solicitado que se honre la memoria de tan ilustre personaje, con un monumento, una plaza, etc., se han negado y algunos ni se han molestado en razonar su negativa, en cambio han erigido estatuas a mitos irrelevantes, que ofenden a la cultura (el Anima de Sayula).
En relación al aporte cultural de Sayula en el pasado, basta recordar que la evangelización del norte del país, la iniciaron sayulenses, entre otros, Fray Juan Larios, franciscano de nuestro convento, cuando todo el norte estaba inexplorado hasta Canadá; poco después, con indígenas cultos de Tlaxcala, y familias de Sayula coparticiparon en la fundación del Nuevo Reino de León (Monterrey).
La hoy UNIVERSIDAD DE COAHUILA, se llamó Instituto de la Fuente, que fue el PRIMER CENTRO CULTURAL DE NORTEAMERICA como dijera un culto escritor mexicano : «cuando en lo que sería Nueva York, todavía pastaban búfalos..».
Ese centro, fue fundado por una familia de Sayula, De la Fuente, (existe una placa que testimonia la gratitud de los coahuilenses), esas familias de coahuilenses fueron los precursores de la civilización, junto con Francisco Vázquez Coronado, quien fue el primero que exploró Texas, Nuevo México, Arizona, Colorado y desde lo alto de las montañas atisbó las promisorias tierras de California.
Los norteamericanos, con todo y su fobia por los hispanos, han levantado monumentos, plazas y bautizado con respeto lugares y playas, bahías y desiertos con los nombres de esos jaliscienses portentosos, sólo en México se regatea el honor y el mérito y se levantan estatuas a sórdidos y pedestres personajes de invenciòn.
Sayula estaba destinada a ser la más importante ciudad del occidente del país, pero el descubrimiento de las minas de plata y oro en Zacatecas, impulsó a Guadalajara como ciudad proveedora de bienes y servicios.
Pero es indispensable recordarles a Zacatecas y a San Luis Potosí, que gracias a la PROVINCIA DE AVALOS, tuvieron losprimeros carpinteros, mineros, herreros y talabarteros que dirigieron los procesos de exploitación, pues nadie en Guadalajara ni en Zacatecas ni en San Luis Potosí, sabía cómo hacer fuelles para sacar el agua de los tiros de las minas, los armeros y herreros de Sayula, que fabricaban espadas de acero, enseñaron sus artes y fueron el baluarte para transformar los desiertos en prósperas empresas que cambiaron la geografía de la Nueva España.
La política virreinal, las conveniencias acabaron con Sayula, ues fue absorbida por la metrópoli en que se convirtió Guadalajara, las guerras intestinas, los guerrilleros y bandidos ahuyentaron a los negocios y más de 300 industrias desaparecieron.
Pero a pesar de ello, Sayula debe ser rescatada del olvido en que se le ha mantenido, su antiguo esplendor se ha apagado por la mediocridad y la indolencia y el conformismo de sus habitantes.
No podemos cambiar la historia, pero sí podemos honrar a nuestros más relevantes personajes que hasta el grado heróico nos legaron esta tierra, ¡Rescatemos del olvido a Sayula..!, ¡Hagámos una ciudad digna, una Ciudad limpia y que no cause vergüenza..!