Por Arturo Fernández Ramírez
Sin lugar a dudas es reprobable, con sus honrosas excepciones, el servicio que siempre ha prestado el IMSS a sus derechohabientes.
Aunque se diga ahora que el deficiente servicio parte en gran medida de la crisis financiera que desde hace aproximadamente dos décadas enfrenta esta central de salud, la realidad es que desde siempre ha habido cosas tan básicas, como el trato cortés hacia los pacientes, que simplemente han dejado mucho que desear.
Es decir, no solo es la falta de dinero lo que aparentemente ha traído como consecuencia el mal servicio del IMSS, sino que también el personal mismo que, salvo contadas ocasiones, su actitud prepotente hacia quienes acuden a las clínicas, es la forma de conducirse.
Pareciera que a la gran mayoría de quienes laboran en el IMSS los contrataron bajo el perfil de haber quien trata con más prepotencia a los pacientes, quienes aparte de tener que soportar la enfermedad que los obliga a acudir a una clínica, también tienen que lidiar con el mal trato que les dan.
Sobre la crisis financiera que, como dijimos, desde hace aproximadamente poco más de dos décadas, enfrenta el IMSS, es un secreto a voces que su origen se encuentra en los malos manejos de que fue objeto por los políticos que en su momento lo dirigieron y que desviaban sus recursos hacia las campañas políticas priístas. Dicho en otras palabras, no solo PEMEX ha sido víctima de la corrupción al destinarse miles de millones a campañas políticas.
Obviamente esos malos manejos obligaron a replantear el sistema de pensiones, que fue el que a finales de los 80's empezó a dejar sin dinero al IMSS.
Y en lugar de esclarecer los actos de corrupción y castigar a los culpables, se optó por crear una nueva ley del IMSS, misma que entró en vigor en 1997 y en la cual se reguló ya este nuevo sistema de pensiones a través de lo que hoy conocemos como las Afores, que no son otra cosa que las Administradoras del Fondo para el Retiro.
Es claro que al estar constituidas dichas Afores en su mayoría por instituciones bancarias, esto es, por la iniciativa privada y que son las que administran parte de los recursos de los que antaño disponía el IMSS, se privatizó esta sección del sistema de seguridad social, porque ahora con este nuevo ordenamiento jurídico, quien otorga la pensión a un derechohabiente es la Afore como institución privada y no el IMSS como organismo público descentralizado.
Los más grave y delicado de este sistema es la fuerte tentación que representan para los mismos gobernantes o políticos, los miles de millones de pesos que son de los trabajadores para su retiro, toda vez que en más de una ocasión se han hecho propuestas de utilizar o disponer de ese dinero para otros fines ajenos a su esencia que no es otra que el garantizar un digno retiro para todos los que están cotizando al Seguro Social.
Pero bueno, retomando nuestro Tema de Interés, es lamentable el pésimo servicio que presta el IMSS a las decenas de millones de personas que como derechohabientes o beneficiarios tienen la necesidad de acudir a alguna de las clínicas.
Una incongruencia total que mientras se desata un terrorismo fiscal contra los patrones que por una u otra razón se retrasan en el pago de las cuotas obrero patronales, por otro lado el IMSS cada vez ofrece un peor servicio.
Y es que ahora ya no solo se habla del desabasto de medicinas, sino también de la falta de atención en urgencias y de la suspensión de consultas por falta de médicos, tal y como ha acontecido en la Clínica 62 de nuestro municipio de Sayula, Jalisco, donde todos los derechohabientes y beneficiarios sufren estas graves carencias del IMSS.
Ojala que realmente se organicen como ha se ha especulado para ejercer presión de una mejor manera y se logren resultados positivos. No es posible seguir soportando un sistema de seguridad social como el que oferta el IMSS. No es un favor el que hacen porque, aunque parezca que se les olvida, se les debe recordar que todos los que laboran ahí se mantienen gracias a las cuotas que los patrones pero también los propios trabajadores pagan de manera puntual. No les están fiando nada. Si el IMSS es bueno para cobrar, también así debe ser para cumplir con el servicio. O usted qué opina estimado lector. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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