jueves, 27 de marzo de 2014

PALABRA DE HONOR
Por Gabriel Camberos
Ya casi no se habla de la Palabra de Honor, ha sido borrada de  algunos diccionarios porque esta fuera de tiempo.
En el año  de 1892, murió don Carlos Fuero. Una calle  en la Ciudad de Saltillo, Coahuila y una en Parral, Chih; llevan su nombre. Más merece por el hecho que les voy a narrar.
A la caída de Querétaro quedo prisionero de los Juaristas el General  Don Severo del Castillo, Jefe del Estado Mayor de  Maximiliano. Fue  condenado a muerte, y su custodia se encomendó al Coronel Carlos Fuero. La víspera de la ejecución dormía el Coronel cuando su asistente lo despertó. El General Del Castillo, le dijo, deseaba hablar con  el. Se vistió de prisa Fuero y acudió de inmediato a la celda del condenado a muerte. No olvidaba  que Don Severo había sido amigo de su padre.
--Carlos-le dijo el General,-- perdona que te haya hecho despertar. Como tu sabes  me quedan unas cuantas horas de vida, y necesito que me hagas un favor. Quiero confesarme y hacer mi testamento. Por favor manda llamar  al padre Montes y al Licenciado José Maria Vázquez. -
--Mi General -- respondió Fuero. -no creo que sea necesario que vengan esos señores. -
--¿Cómo?-se irrito el General del Castillo. -Deseo arreglar las cosas de mi alma y de mi familia, ¿y me dices que no es necesario que vengan el Sacerdote y el Notario?-
-- En efecto, mi General-repitió el Coronel Republicano.- No hay necesidad de mandarlos llamar. Usted ira personalmente a  arreglar sus asuntos y yo me quedaré en su lugar hasta que usted regrese.--
Don Severo Del Castillo se quedo estupefacto. La muestra de confianza que le daba  el joven  Coronel era extraordinaria.
--Pero Carlos-le respondió emocionado.--¿Qué garantía tienes de que regresare para enfrentarme al pelotón de  fusilamiento?
--Su PALABRA DE HONOR, mi General-contesto Fuero.
--Ya la tienes-dijo don Severo  abrazando al joven Coronel.
Salieron los dos y dijo Fuero al encargado de la guardia:
-- El señor General Del Castillo va a su casa  a arreglar unos asuntos. Yo quedare en su lugar como prisionero. Cuando el regrese me manda usted despertar.--
A la mañana siguiente, cuando llego al cuartel el Superior de Fuero, General  Sostenes Rocha, el encargado de la guardia le informo lo sucedido. Corriendo fue Rocha a la celda en donde estaba Fuero y lo encontró durmiendo tranquilamente. Lo despertó moviéndolo.
--¿Que hiciste Carlos?, ¿Por qué dejaste ir al General?
--Ya  volverá-le contesto Fuero. -Si no, entonces me fusilas a mí y asunto arreglado. -En ese preciso  momento se escucharon pasos en la acera.
--¿Quién vive? Grito el centinela.
--¡México!-respondió la vibrante voz  del General Del  Castillo. - Y un prisionero de guerra. -
Cumpliendo su PALABRA DE HONOR volvía Don Severo para ser fusilado.
El final de esta historia es muy feliz. El General Del Castillo no fue pasado por las armas. Rocha le contó a Mariano Escobedo lo que había pasado, y este a Don Benito Juárez. El Benemérito, conmovido por la magnanimidad de los dos  militares, indulto al General y ordeno la suspensión de cualquier procedimiento contra Fuero. Ambos eran hijos del COLEGIO MILITAR; ambos hicieron honor a la Gloriosa Institución.
EXISTEN MUCHAS FAMILIAS QUE A SUS HIJOS LES INCULCAN TENER PALABRA;  PALABRA DE HONOR.
Aunque no lo crean, esa es una de las esperanzas de MEXICO…que espero la retomemos y la hagamos valer.
De ahí deriva también la palabra "Fuero", tener "Fuero" es tener un privilegio, que debe  sustentarse en la PALABRA DE HONOR y en un juramento o "protesto" como le llaman,  que todos los políticos han olvidado y hecho a un lado para gozar de canonjías, privilegios fuera de la ley y en resumidas  cuentas PARA COMETER ABUSOS DE PODER SIN LIMITES, robar y cometer toda clase de fraudes contra el Pueblo y la Nación.









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