Semanario Horizontes

LA POLITICA DESDE GAYOLA

Por Rodrigo Sánchez Sosa

"La mayoría no sólo representa siempre la ignorancia, sino también la cobardía. Y del mismo modo que 100 cabezas huecas no hacen un sabio, de 100 cobardes no surge nunca una heroica decisión." Adolf Hitler.

La supervivencia del hombre en la tierra la debe a la ciencia, a la razón, no a la fe. Ciencia es saber, fe es creer. La gente cree que los cañones anti granizo impiden la lluvia en Sayula; no lo sabe. Lejos de informarse para SABER, cree las consignas panfleteras de charlatanes de la política que aprovechan la oportunidad. Si la ciencia ha significado la sobrevivencia de  la humanidad, la charlatanería y la superstición significan la muerte, la extinción de la especie. Los alemanes creyeron en Hitler, no les importó informarse sobre los dichos de este "No queremos a los judíos y se van a ir; no más judíos..." seguramente se oyó en la Alemania de los años treinta del siglo pasado. Eso les costó casi su desaparición como nación y al mundo millones de muertos.
Comparemos a la Alemanía inmeditamete anterior a Hitler y los nazis, con el México contemporaneo. El mundo vivia en 1930 el efecto de la gran depreción económica de 1929, la quiebra financiera que afectó a los principales bancos del mundo, como la de nuestro tiempo, de 2008. A la Alemanía de 1930 se le habia impuesto un tratado de paz luego de perder la primera guerra mundial en 1919, El Tratado de Versalles, que la agobiaba económicamente por los pagos impuestos por este tratado. México biene de una guerra contra el narco (2006) y la imposición de un rescate finaciero llamado FOBAPROA (1994) que afecta la economía nacional ahorcandola. En la Alemania de los años treinta del siglo pasado, la situación es acuciante, ya que a los devastadores efectos económicos de la depreción, se sumaba la obligación de pagar el tributo de la derrota en la Primera Guerra Mundial, y el descontento popular alemán ante la injusta situación, hacía que las calles se llenaran de manifestaciones extremistas de toda índole. En México pasa lo mismo hoy, luego de la crisis finaciera global del 2008, las decenas de miles de muertos y desparecidos en la guerra contra las drogas y el pago de más de 600 mil millones de pesos, sólo de intereses de una deuda que creció de 170 mil millones de pesos a un billón 300 mil millones de pesos, que si se cubre sólo será dentro de 70 años. Todo lo cual, llena las calles del país de manifestaciones en contra de esta situación promovida y potenciada por la corrupción, que lo mismo protesta por la violencia, la injusticia, el aumento de la gasolina o la depredación del medio ambiente, caso que nos ocupa.
En el periodo histórico alemán que comparamos, a la crisis político-económica hay que agregar una crisis ideológica caracterizada como una "revolución contra el positivismo" (o la ciencia); el espíritu de esa época puede ser descrito como una amalgama o mezcla de ideas caracterizado por un rechazo al racionalismo, junto a tentativas de incorporar "explicaciones científicas" a preconcepciones o incluso prejuicios explicativos del mundo, por ejemplo, el racismo, que dieron origen a propuestas tales como las de la eugenesia, o la limpiesa étnica, la eliminación sistemática de los judíos y razas concideradas inferiores.
En México los discursos se radicalizan y se caracterizan también en un rechazo a la razón, la incorporación a este discurso de pseudo ciencias que justifican prejuicios sobre la realidad y fomentan dogmas pseudo cintíficos, políticos y ambientalistas irracionales.
En este contexto, la busqueda de chivos espiatorias acordes al concepto nazi de política: "Aquello que nos dice quién es el enemigo" manipula a la masa a travéz  de su frustración e ingnoracia. Lo charlatanes aprobechando la oportunidad, dan a las masas en qué creer, alejándolos de la verdad. Introduciendoles cada vez más en la barbarie. El desconteto generalizado, la energía de ese procesos social, se vuelve contra enemigos específicos creados por el imaginario popular desde moldes sugeridos directa o indirectamente por los charlatanes. Cada consigna ira entonces a reforzar lo irracional, la superstición y el prejuicio de la masa, para crear alrededor de ello un poder totalitario, ya no importa si algo es verdad y puede ser sustentado en base a la razón; sino, aquello que puede servir como creencia con fundamento en dogmas populares, en miedos y prejucios, en el morbo y la desconfianza a los enemigos señalados de antemano.
¿Y cómo no iban a creer los alemanes de tiempos de hitler que el enemigo eran los judíos? Ellos eran entre los alemanes de 1930 lo más prosperos, los cintíficos e intelectuales de renombre; banqueros y ejecutivos al frente de importantes corporaciones ¿No era acaso muy popular el libro "Los protocolos de los sabios de Sion", donde se denuciaba el complot judio contra europa y el mundo? ¿No se le ofrecia una solución efectiva y rápida al pueblo explotado y empobrecido por los corruptos del gobierno alemán, los extrajeros, judíos y comunistas? ¿No se salvaba a la madre patría de su destrucción y humillación enarbolando un nacionalismo radical?  Cuando se comenzarón a quemar libros y a perseguir a cintíficos e intelectuales judíos, cuando la ley se modificó para justificar aberraciones legales y legalizar necedades como el racismo; se hacia en nombre de una "causa justa", salvar al pueblo alemán.
Analicemos lo mismo hoy en Sayula en el caso de los cañones ¿Quién puede dudar de la voracidad de las agroempresas o de la colución corrupta de la autoridades locales en el México actual? ¿No se está ofreciendo una solución rápida a las angustías del pueblo: la erradicación de los políticos y la corrupción, el destierro de los depredadores del medio ambiente y sus cañones anti granizo que modifican el clima? ¿No se salva a Sayula y la naturaleza enarbolando la bandera del "activismo ecológico"? Ya se insulta y se humilla a quienes advierten de lo falso de este discurso desde la ciencia, la razón, la ecología e incluso la política; el discurso irracional de los líderes de los activistas se readicaliza al grado de proponer saltarse la ley, peor aún, se perfila a ligislar esta barbarie y convertir en ley el prejuicio, la ignorancia y la necedad. Por si fuera poco, estos mismos líderes sociales activistas, planean postularse para dirigir el destino del municipio en 2018, todo en nombre de una "causa justa", como la de Hitler.