miércoles, 3 de abril de 2019

   NUESTRA POBLACION SE SIENTE INSEGURA

Por Arturo Fernández Ramírez
Consultando la página del INEGI, de manera específica los resultados del vigésimo segundo levantamiento de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), realizada en la primera quincena de diciembre de 2018, tenemos que durante ese mes, el 73.7% de la población de 18 años y más consideró que vivir en su ciudad es inseguro.
Y en un análisis comparativo, el mismo INEGI señala que este porcentaje representa un cambio significativo respecto a septiembre de 2018 y con respecto a diciembre 2017. La percepción de inseguridad siguió siendo mayor en el caso de las mujeres con 78%, mientras que para los hombres fue de 68.6 por ciento.
Las ciudades más inseguras fueron: Reynosa, Chilpancingo de los Bravo, Puebla de Zaragoza, Coatzacoalcos, Ecatepec de Morelos y Villahermosa, mientras que las de menor percepción quedaron señaladas la siguientes: San Pedro Garza García, Mérida, Saltillo, Puerto Vallarta, Durango y Los Cabos.
El 83.4% de la población siente inseguridad en los cajeros automáticos localizados en la vía pública, 75.3% en el transporte público, 70.7% en el banco y 67.8% en las calles que habitualmente usa.
A nivel nacional, en 35.8% de los hogares en áreas urbanas, al menos uno de sus miembros fue víctima de los delitos de robo y/o extorsión. Esta cifra se incrementa en la Región Oriente de la Ciudad de México y en Ecatepec de Morelos, al llegar a 54.2% y 54.1%, respectivamente.
Por otro lado, en Tuxtla Gutiérrez y La Paz, la proporción de hogares con víctimas de robo y/o extorsión es de 14% y 18.2%, respectivamente.
De igual forma, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de la Seguridad Pública (ENVIPE) 2018 que también lleva a cabo el INEGI, se estima en 25.4 millones el número de víctimas de 18 años y más en el país durante 2017; mientras que el 35.6% de los hogares del país contó con al menos un integrante como víctima del delito y en el 93.2% de los delitos no hubo denuncia, o bien, la autoridad no inició una averiguación previa o carpeta de investigación.
Como podemos ver, nuestra población se siente insegura, no solo en las calles, sino en su propio hogar porque ha sufrido robos, porque ha sido víctima de la delincuencia.
Los cajeros automáticos de los bancos es uno de los lugares en donde se percibe una mayor inseguridad. Y no es para menos, los delincuentes están al acecho de los usuarios porque saben que en la mayoría de los casos los utilizan para disponer de dinero en efectivo.
Y si el 97% de los delitos que se denuncian no son castigados, resulta que el 93.2% de los delitos no hubo denuncia, o bien, la autoridad no inició una averiguación previa o carpeta de investigación, lo que significa que del 7% de los delitos que se denuncian, solo el 3% se castigan. Así de grande es la impunidad en nuestro país.
Entonces, es importante que nuestras autoridades tomen cartas en el asunto para que nuestra población logre vivir con tranquilidad y no en el estado de zozobra en el que actualmente se desenvuelve.
Y no necesariamente debemos enfocarnos en el ámbito de los cuerpos de seguridad pública, sino en atacar las causas de la inseguridad como lo son el desempleo, la falta de espacios recreativos, deportivos, culturales y en general, de muchas oportunidades para su desarrollo y crecimiento personal, familiar y social.
Esperemos entonces que exista una verdadera coordinación y no sumisión, entre los tres niveles de gobierno para que en forma conjunta se desarrollen programas integrales que en el corto, mediano y largo plazo, den como resultado una significativa disminución de la inseguridad pública. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com. https://semanariohorizontes.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario