Semanario Horizontes

EL DIA DEL TRABAJO, SIMBOLO DE LUCHA DE LA CLASE TRABAJADORA

Por Arturo Fernàndez Ramìrez
Como cada año, el pasado 1 de mayo tuvo lugar el festejo del llamado Día del Trabajo, el cual simboliza la lucha de la clase trabajadora para evitar ser explotada por la clase patronal.
La historia nos dice que durante muchos siglos la clase patronal explotó (más que ahora) de manera indigna a los trabajadores, quienes eran llamados esclavos, por lo que fue necesario que la sociedad se organizara e iniciara sus luchas para revertir dicha situación.
Desde luego que no fue fácil porque hubo muchos muertos derivados de los actos represivos que se ejercieron en contra de los trabajadores cuyo único delito era exigir mejores condiciones de trabajo.
Uno de los logros fue la creación del Derecho Laboral para regular de manera especial las relaciones laborales entre los trabajadores y los patrones.
Y es que antes del Derecho Laboral, las relaciones obrero patronales eran reguladas por el Código de Comercio, al considerarse como una actividad comercial donde el trabajador vendía su fuerza de trabajo y el patrón la compraba.
En esta perspectiva, no había posibilidad alguna de considerar la dignidad de los trabajadores en su aspecto humano, ya que el Derecho Mercantil todo lo ve como una contraprestación de compra y venta, de ahí que no se justificaban muchas prestaciones como las vacaciones, el aguinaldo, la seguridad social, entre otras.
Con el derecho laboral se estableció que el trabajo es un derecho y un deber sociales, no es artículo de comercio, por lo que las normas del trabajo tienden a conseguir el equilibrio entre los factores de la producción y la justicia social, así como propiciar el trabajo digno o decente en todas las relaciones laborales.
Al hablar de que se pretende conseguir un equilibrio, es porque se reconoce que de entrada, existe una desigualdad entre el trabajador y el patrón, ya que quien tiene el capital, actúa como todas las ventajas frente a quien lo único que posee es su fuerza de trabajo.
Por eso, frente a esa desigualdad, el derecho laboral busca el equilibrio y para tales fines, es necesario que establezca bases protectoras de los derechos mínimos que debe tener un trabajador, desde su jornada laboral, un salario mínimo, entre otros.
No obstante lo anterior, debemos reconocer que todavía falta mucho por hacer, ya que con todo y los instrumentos jurídicos que hoy en día existen, como Convenios Internacionales, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la Ley Federal del Trabajo, entre otros, muchos trabajadores siguen siendo explotados, tal es el caso de los empleados del campo.
Aunado a lo anterior, la clase patronal no deja de luchar para evitar que las conquistas laborales a favor de los trabajadores, no cumplan su cometido, corrompiendo a las autoridades que se supone deben garantizar una justicia social.
La clase patronal desde luego también busca acceder al poder o bien, influir en los gobernantes para que a través de reformas laborales los trabajadores pierdan los derechos que en épocas pasadas les fueron reconocidos.
Por eso, lejos de pensar que el 01 de mayo dejó de tener vigencia, no es así, porque mientras siga habiendo la explotación del hombre por el hombre, mientras se sigan pisoteando los derechos de los trabajadores, debemos tomar como ejemplo las luchas históricas que hombres valientes han protagonizado, para nosotros hacer lo que en estos tiempos nos corresponde hasta lograr que en realidad exista una verdadera igualdad social. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com  https://semanariohorizontes.com