Por Arturo Fernández Ramírez
Al analizar el turismo, se reconoce que la religión es una de las principales fuentes de su promoción, ya que son millones de personas las que viajan a diferentes lugares en lo local, nacional e internacional, motivados por su fe y por su devoción.
Turismo religioso es como se le identifica y es, sin lugar a dudas, una de las principales actividades que generan y fortalecen la economía de muchas comunidades.
Incluso, aun cuando existen ya muchos lugares turísticos por tradición, hay otros que luchan por fomentar el turismo y convertirse en un destino atractivo para visitantes.
Por ejemplo, la vocación de Sayula es la agricultura, pero desde hace tiempo los gobiernos municipales han hecho esfuerzos para que el turismo sea un nuevo vocacionamiento, pretendiendo así fortalecer la economía local, partiendo de la premisa de que contamos con muchos atractivos naturales, religiosos, culturales, entre otros.
En el ámbito estatal y nacional, como parte del turismo religioso, una de las peregrinaciones más reconocidas es a no dudarlo la tradición de ir a Talpa de Allende, Jalisco, a visitar y venerar la imagen de la Virgen.
La Ruta del Peregrino es como en el ámbito turístico se le conoce y en la cual participan millones de personas cada año, no solo de Jalisco, sino de la República Mexicana y del extranjero.
Y es precisamente en este mes de marzo en el que la mayor parte de esos millones suelen ir a Talpa, de ahí que en estos momentos veamos infinidad de grupos bien organizados que a pie, en bicicleta, moticicleta, camiones o en vehículos particulares, van a visitar la imagen de la Virgen.
Desde luego que Sayula no es la excepción y por eso vemos a miles de nuestros paisanos que ya están en marcha, otros que ya regresaron y muchos más que en los próximos días estarán haciendo lo propio para mantener viva la tradición, la fe y la devoción.
Como lo dijimos, la razón principal es la fe que se tiene hacia la Virgen de Talpa, es la motivación fundamental de esta tradición, pero eso de ninguna manera choca ni ha chocado con que en un estado laico, se reconozca como parte de nuestra cultura y de nuestras actividades económicas que le dan vida al turismo, la tradición de la que hoy hablamos.
Y tampoco debemos dejar de reconocer el gran esfuerzo físico y económico que todas y todos hacen cada año, manteniendo viva "la ida a Talpa" la Ruta del Peregrino. Muchas felicidades, tengan la certeza que su fe encontrará la compensación correspondiente. Animo y vamos para adelante. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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