Centro Histórico de Sayula de 1882 a 2019,
historia de nuestro patrimonio común
Reportaje de Investigación de Rodrigo Sánchez Sosa, Cronista de Sayula
El parían de Sayula fue construido en 1882, según don Federico Munguía, por iniciativa del presidente municipal de esos años, don José Julián Joaquín Vazquéz Morett, quien trajo el diseño de oriente durante un viaje, al parecer a la India.??Con una arquitectura de estilo neo gótico, esta edificación fue parte del empuje modernizador del gobierno de Porfirio Díaz que en el año 1880 hasta el 11 de junio de 1881, fungió como titular del Ministerio de Fomento, luego de que cedió la presidencia de México a Manuel González, su incondicional, del año 1880 a 1884; durante los cuales, los procesos de modernización del porfiriato incluyeron la arquitectura influida por las modas europeas como el historicismo (neogótico) y el neoclásico.
Las clases sociales altas de las ciudades y pueblos importantes del México de la segunda mitad del siglo XIX, se sumaron a las políticas del porfirismo, invirtiendo en los planes de modernización del país. Fue el caso del Parián de Sayula donde los vecinos acaudalados se comprometieron con la construcción de este centro comercial, al que llamaron como aquél que existió en la Ciudad de México entre 1700 y 1843, donde se comerciaba con mercancía suntuosa traída principalmente de Asía, para satisfacer la demanda de clases altas del virreinato
Ciudades importantes en Jalisco, como Ojuelos?y Tlaquepaque, entre otras, - incluida la capital del estado - edificaron construcciones como esta, con la misma denominación Parían, algunas ya no existen, como el Parían de Guadalajara. De las que aún se preservan, la más famosa, la de Tlaquepaque, no guarda parecido con la arquitectura del Parián de Sayula.
Edificado el Parián de Tlaquepaque, antes que el de Sayula, en 1878, sus portales se terminaron de construir 50 años después; sin el estilo del tiempo de su construcción.
El caso del Parían de Ojuelos con sus??noventa y seis arcos ojivales, estos si de estilo neogótico, construido en 1880, con una plaza intermedia (Plaza Juárez), obedece al estilo de la época, pero no se acerca al mostrado en el Parían de Sayula.
El Parían de Sayula como un proyecto integral, creemos, incluía el quiosco, la plaza de armas y sus fuentes de cantera; el edificio y su entorno re modelado en ese entonces, según lo investigado, parte de la estrategia político-económica del porfiriato para meter al México de la segunda mitad del siglo XIX en la modernidad del liberalismo comtiano de fines de ese siglo. Este edificio podría estar asociado no sólo Jardín Principal, sino también al Jardín Botánico Plaza Celso Vizcaino; incluso, al portal Colón y sus arcos ojivales, podrían relacionarse con este.
El Sayula decimonónico, se comprometió con la visión porfirista de nación y modificó su traza colonial para mostrar la pujanza del régimen a finales del siglo XIX en esta parte del estado; intentando, difícilmente, dejar atrás la inercia de 300 años de colonialismo español y leyes virreinales, como sucedía en todo México.??
La remodelación del primer cuadro de la ciudad, tardó alrededor de 20 años, comenzando en 1882 y terminando aproximadamente en 1902, durante los cuales se construyeron (junto lo mencionado anteriormente), el Portal Libertad y el Portal Galena, al final de este periodo. El quiosco de la plaza de armas, se levantó en su lugar actual en 1895 (es más viejo que el famoso quiosco francés de Guadalajara que data de 1907). El remate de esta trasformación del centro histórico, fueron las fiestas del centenario de la Independencia de México en 1910, cuando se terminó el actual edificio de la presidencia municipal de Sayula (que antes era la cárcel municipal) con su reloj que se inauguró precisamente durante la ceremonia del grito de la Independencia en 1910. Se trasladaron entonces, las oficinas de la administración municipal de lo que hoy es la casa de la Cultura Juan Rulfo, antes Casa Consistorial - la presidencia virreinal de Sayula - al lugar actual en la Esquina de Escobedo e Independencia. El pórtico de la presidencia municipal se construyó en 1906, en vistas de las próximas fiestas nacionales, por el entonces presidente de Sayula o jefe político como se le conocía entonces, Ismael Padilla.
Los festejos del centenario de la Independencia de México en Sayula estuvieron a cargo del jefe político (presidente municipal) Margarito González Rubio, se encementó el piso de la Plaza de armas que era de ladrillo rojo; como ya dijimos se adquirió el reloj de la presidencia municipal; se mandó elaborar una estatua del padre de la patria Miguel Hidalgo y Costilla que se colocó en el Jardín principal en un columna, bajo la cual se colocó una capsula del tiempo con documentos y monedas de aquellos años; se propuso cambiar el nombre de Sayula al congreso del estado por Sayula de Allende para honrar a este héroe de la Independencia. Afortunadamente hoy para nosotros el congreso no aprobó esa iniciativa entonces.
En 1984, bajo el gobierno de Rafael Chávez Arellano, se modificó el jardín principal. uniendo a costa del último tramo de la calle 5 de mayo, el portal Hidalgo con este. Se redistribuyeron las estatuas de los héroes nacionales y se colocaron las fuentes de cantera en el lugar que hoy ocupan, estando estas antes en las cuatro esquinas de La Plaza de Armas.
Finalmente, durante el primer decenio del presente siglo, se colocó un hemiciclo de cantera durante el gobierno de Samuel Rivas Peña, copia exacta de uno parecido en la Alameda de la Ciudad de México. Durante el gobierno de Jorge Campos, en 2017, se intentó construir un Centro Cultural hoy en el abandono en lugar que ocupaba el Jardín de Niños Celso Vizcaino, antes una plaza y jardín botánico, así mismo se permitió la instalación de taxis y moto taxis en plaza de Armas en su costado sur y norte respectivamente, mientras en su parte poniente se otorgó a comerciantes ambulantes los domingos. Este año se, se taló una antigua y emblemática palmera de sus jardineras y se colocó el reloj arriba citado, hace dos semanas. Desde entonces, nuestro centro histórico en Sayula tiene el aspecto que hoy podemos ver.
La intervención de un centro histórico como el nuestro no es cuestión de juego, ni de ocurrencias, nuestro centro histórico está protegido por el INAH así como por la Secretaria de Patrimonio del Estado. Es un tesoro invaluable de nuestro pasado de casi medio milenio. Cuenta nuestra historia como pueblo y por ello da cuenta de nuestra identidad, incluso en su arquitectura está plasmada la historia de nuestro país. Debería cuidarse y protegerse como el legado que es. Algo que no se ha hecho con diligencia por parte de nuestros gobernantes locales. Nada en este perímetro esta allí por casualidad o capricho al menos nada de lo que realmente puede considerarse patrimonio de los sayulenses, ciertamente hay aberraciones como las lámparas coloniales puestas en los muros del Parían y portal Galeana, las casas "modernas" de pésimo gusto que sustituyeron a las tradicionales casonas, las desafortunadas y desinformadas intervenciones a estos inmuebles, los predios abandonados, los edificios ruinas u obra negra, los taxis y moto taxis, el ambulantaje y el reloj fuera de contexto que se acaba de colocar entre el Portal Hidalgo y La Plaza de Armas .
El interés público debe estar por sobre el interés particular, nadie prende fuego a su casa sólo porque tiene frío. La preservación de este museo al aire libre, que es nuestro centro histórico, debe ser prioritario. El beneficio de un centro histórico preservado y respetado es inimaginable para todos nosotros: hace más atractiva nuestra ciudad, nos llena de orgullo y atrae visitantes lo que se traduce en fuente de ingresos de muchos y apoyo a la economía de todos. Si no lo tuviéramos y nos encontrásemos en la necesidad de construirlo, comprenderíamos todo esto.
No existe y es necesario un inventario local de nuestro patrimonio arquitectónico, esto no permitiría que los permisos de construcción que se dan por parte de Obras Públicas, sean costas de la destrucción de inmuebles centenarios de esta zona del municipio e incluso de los mismos portales. No basta el reglamento del centro histórico es necesario saber, informarnos, ser conscientes de lo que tenemos y estamos destruyendo, para remediar el problema. De buena fuente sabemos que el Ayuntamiento intentará rescatar del deterioro nuestros emblemáticos portales, lo que no es una garantía, pero al menos hay conciencia de ello. Ahora toca a la ciudadanía hacer conciencia de esto, al menos. Por favor no sigamos destruyendo las fachadas y fincas centenarias de nuestro centro histórico, dejemos de invadirlo convirtiéndolo en un sucio mercado callejero, todos tenemos derecho a trabajar; pero también tenemos obligaciones, prioritariamente la de preservar nuestro entorno cultural. Organicémonos, negociemos y lleguemos a acuerdos que generen medidas adecuadas, tomando en cuenta que el interés común y único en ellas debe ser Sayula, el Sayula que heredamos pero que no es nuestro porque debemos pasarlo a la siguiente generación mejor de cómo lo recibimos. https://semanariohorizontes.com
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