SE APROBO REFORMA CONTRA EL OUTSOURCING
Por Arturo Fernández Ramírez
Diputados y Senadores dictaminaron a favor la Iniciativa que el año pasado les envió el Ejecutivo Federal en contra de la subcontratación laboral. La intención es proteger a la clase trabajadora que presta sus servicios sin ninguna prestación, sin generar antigüedad, sin derecho a una jubilación. Las voces opositoras argumentaban que en lugar de desaparecer esta forma de contratación, se regulara y sancionar a las empresas que lo utilizaban para afectar a las y los empleados. Lo cierto es que sí había muchos abusos de patrones que no solo eludían sus obligaciones laborales, también las fiscales. Como se le quiera ver, frenar el outsourcing es un gran avance en justicia social.
El gobierno argumentó que hay empresas que tienen hasta 250,000 trabajadores bajo el esquema de outsourcing, con lo que logran evadir impuestos y eludir sus responsabilidades laborales. Seis de cada diez trabajadores mexicanos no cuentan con seguridad social, aguinaldo, prima vacacional, ni ninguna otra prestación de ley. Utilizar terceros para disfrazar una relación laboral, según estimaciones oficiales, afecta por lo menos a 4 millones de trabajadores. De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), al cierre de 2019 se contabilizaron 4,685,356 trabajadores en este esquema de subcontratación.
Datos duros que reflejan el abuso de muchas empresas y la grave situación que viven millones de trabajadoras y trabajadores por el outsourcing. Quedan en estado de indefensión ante la carencia de las prestaciones mínimas que por ley les corresponden. Y aunque en una demanda laboral pueden ejercer acciones en contra de quien los subcontrata y donde prestaban su servicio laboral, sabemos que los juicios duran muchos años. Aunado a que gracias a la reforma de Peña Nieto, los salarios caídos son por un solo año, como si el trabajador tuviera la culpa del rezago en las Juntas o Tribunales.
Con la reforma aprobada se prohíbe la subcontratación de personal, que consiste en que una persona física o moral proporcione o ponga a disposición trabajadores propios en beneficio de otra. En servicios especializados o de ejecución de obras especializadas, deberá formalizarse mediante contrato por escrito. Y las personas físicas o morales que proporcionen los servicios de subcontratación deberán tener registro ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
Sabemos que no basta la aprobación ley para que las cosas cambien. Es necesario que se respete, se aplique y se haga cumplir. También, estamos conscientes que la clase empresarial cuenta con los mejores abogados y pueden encontrar formas de burlar las normas jurídicas. Vamos a esperar que en realidad se ponga fin al outsourcing y que la clase trabajadora sienta que sí se le está haciendo justicia. Por lo pronto, aplaudimos la reforma que comentamos. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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