Semanario Horizontes

 Crónica de los atracos al público en un baile de carnaval

*Un atraco que las autoridades no deben permitir

Relatada por un asistente a uno de los bailes del carnaval, por cierto de los últimos efectuados porque luego vino el paro del festejo por la pandemia, nos revela el atraco y el cinismo como se conducen los que organizan los bailes del carnaval, en la explanada del tianguis. Como ya se anuncian nuevos eventos por venir resulta interesante conocer cómo se las gastan estos vivales que sólo vienen a atracar al pueblo con el cinismo más aberrante, con la complicidad (ayuntamiento) de quienes los contratan, cuando las autoridades tienen el deber de defender a la gente, al público, al pueblo pues y hacen caso omiso de ello.

En este relato no situamos en el evento de la presentación aquí del cantante Pancho Barraza, una explanada "hasta la madre", señala nuestro entrevistado, lleno absoluto, solicitaron el servicio a un mesero que luego se dieron cuenta son expertos en estafar al consumidor y así van de pueblo en pueblo. De entrada, los que consiguen una mesa en la zona que llaman VIP y bajo severa amenaza de sacarlos a patadas del baile con guaruras, les señalan que es OBLIGATORIO comprar una botella, lo que constituye una severa violación a la ley que como ciudadano y consumidor tenemos todos, ¿cómo que obligatorio comprar una botella o te sacan del baile, pues qué autoridades municipales permiten tal subajación de sus ciudadanos…?

 Un six de cerveza tenía un costo cercano a los 500 pesos, .con el agregado de que el mesero le pidió le regalara una lata de favor, pero luego se dio cuenta de que igual el mismo mesero pedía una copa o una cerveza en cada mesa…?. Sabe usted por qué, amigo lector?. Porque así tendrían los clientes qué solicitar más pronto más botellas o cervezas. Es decir alentaban el consumo por la fuerza. Un refresco, que por cierto los sirven de cuartito o minis, a OCHENTA PESOS, una sirvengüenzada total, por no decir que se comportan los meseros como vulgares "prostis" cuyo trabajo es precisamente ese detalle, hacer consumir al cliente para que la casa gane.

Llegó la hora de ir al baño, un tumulto de personas, muchas del sexo femenino, queriendo hacer sus necesidades pero sólo había DOS letrinas para CINCO MIL PERSONAS, que provocó que incluyendo a las mujeres tuvieran que hacer pipí  (o de los dos) a cielo abierto, a la vista de todos, algunas hasta se tuvieron que meter al baño de los hombres porque la necesidad las obligaba a deslindarse de pudores en esos momento en que la necesidad apremiaba. "De plano me tocó ver como una joven se estaba orinando en la propia escalera..", subraya nuestro entrevistado.  Un ultraje a nuestras mujeres por parte de estas cínicas empresas,  pero lo peor, permitido y aceptado por las autoridades que contratan estos eventos sin atender y defender a los consumidores del atraco de que serán objeto. Y más de lo peor que hombres, jóvenes y adultos permitan tal atrocidad y falta de respeto a sus mujeres, a sus novias a sus esposas y todo por ver a un artista mediocre.

Así las cosas, y si nada ha cambiado en los eventos en su organización como se supone que seguirá la misma tónica, ya sabe lo que espera en los eventos de carnaval por venir y cómo será tratado por estos vivales.