Semanario Horizontes

             Los incendios forestales, otra vez

Por Arturo Fernández Ramírez

1,385 incendios forestales han sido registrados del 01 de enero al 16 de marzo de 2023, en 30 entidades federativas, con una superficie afectada de 33,598.91 hectáreas. Contra 1,483 quemas en el mismo periodo de 2022, con 42,926.14 hectáreas dañadas. Los estados con mayor incidencia han sido la Ciudad de México, Jalisco, México, Puebla, Tlaxcala, Michoacán, Veracruz, Chiapas, Morelos y Durango, que representan el 87% del total nacional. Y los que ha sufrido más afectación son Jalisco, Sonora, Chihuahua, Guerrero, Puebla, Oaxaca, Chiapas, Tamaulipas, Michoacán y Tabasco. Entre las posibles causalidades, con el 43.5% están las actividades ilícitas y el 0.1% las naturales. Aunque estas estadísticas dicen que en el presente año ha habido menos siniestros y perjuicios, en comparación con el anterior, de ninguna manera podemos confiarnos ni cantar victoria. Porque es mucho el deterioro que sufre nuestro medio ambiente, vienen los días fuertes del estiaje y las principales causas siguen siendo el dolo y negligencia del ser humano.

   Lo anterior en base al Reporte Semanal Nacional de Incendios Forestales, elaborado por la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR). En el que también se contiene una clasificación de las quemas, según el impacto que generan al medio ambiente, en mínimo, moderado y severo.

   De impacto mínimo, se consideran los que ocasionan menos del 20% de mortalidad al arbolado. Con diámetro normal con corteza igual o mayor a diez centímetros, daño mínimo a árboles vivos y sin necesidad de tiempo para su recuperación. En lo que va del año se han registrado 1,344.

   Los de impacto moderado, causan entre el 20% al 50% de mortalidad. Con diámetro normal con corteza igual o mayor a diez centímetros, daño parcial y requieren de 5 a 10 años para su recuperación. En lo que va del año se han registrado 35. 

   Mientras que los incendios de impacto severo, causan más del 50% de mortalidad. Con diámetro normal con corteza igual o mayor a diez centímetros, daño severo con árboles muertos con consumo de biomasa y requieren más de 10 años para su recuperación. En lo que va del año se han registrado 6.

    En cuanto a las posibles causalidades de los incendios forestales, las actividades ilícitas registran el 43.5%; las actividades agrícolas 15.2%; desconocidas 12.6%; actividades pecuarias 12.5%; fogatas 5.8%; fumadores 2.5%; quema de basureros 2.5%; cazadores 2.4%; otras actividades productivas 1.5%; limpias de derecho de vía 0.6%; residuos de aprovechamiento forestal 0.4%; transportes 0.2%; naturales 0.1%; festividades y rituales 0.1%.

     Aunque las estadísticas que aquí analizamos reflejan que, en comparación con el año anterior, en el presente 2023 ha habido menos incendios, una menor superficie afectada y que tan solo 6 han sido de impacto severo, de ninguna manera podemos confiarnos ni cantar victoria. Porque en términos reales, es mucho el deterioro que sufre nuestro medio ambiente cada época en la que se ausentan las lluvias. Además, vienen los días fuertes del estiaje y si tomamos en cuenta que las principales causas que provocan las quemas siguen siendo el dolo y negligencia del ser humano, se avizora un panorama gris u oscuro. Es mejor reflexionar y tomar conciencia de ello para disminuir estos siniestros.