Semanario Horizontes

 Política e ineptitud…presente en Sayula

*”La tradición mexicana es ser incompetente pero haces creer a los demás lo contrario”

Por Rodrigo Sánchez Sosa

Seis años es mucho tiempo para demostrar la capacidad de alguien en un campo. Si en seis años no demuestras y te demuestras tu habilidad para desarrollar la tarea que te fijaste y te fijaron, eres en ese campo que escogiste, un inepto, un incompetente o un farsante.

 Claro que en la política lo tradicional mexicana es ser incompetente pero, haces creer a los demás lo contrario. Algo que no es tan difícil si uno es un farsante. La máxima o dicho romano de, al pueblo pan y circo, es la base antigua en la que se sienta el lema de los incompetentes, porque la política, como los griegos que la desarrollaron la entendían y la propia raíz etimológica lo indica es el asunto de la ciudad la Polis en griego, de ahí política. Somos animales gregarios es decir estamos diseñados a vivir en grupo, el hombre no puede vivir aislado de otros hombres y dado esto por la naturaleza, los problemas de jerarquización y de intereses que se dan al interior de la comuna, se hace necesaria la política, algo que va más allá de la diplomacia y que muchas veces se mueve en el filo de la guerra a la cual substituye, porque no hay dos hombres iguales. Como decía Unamuno, el filósofo español, los hombres somos iguales porque somos diferentes. La política es necesaria por nuestra naturaleza humana, como decía otro filósofo, Aristóteles, el hombre es un animal político. Fracasar en la política o hacer de esta un fraude, nos convierte en animales comunes, con ambiciones mezquinas, egoístas y frustrantes para quienes se gobierna. Hacer de la política un circo es señal de decadencia, limitarla a dar lo básico y elemental como único fruto de un esfuerzo de administración y concilio de intereses, pan, empobrece y embrutece a un pueblo completo. Veámonos a nosotros mismos con 80 años de gobiernos priistas en México, más de 80% de pobres en el país, y uno de los sistemas educativos y de justicia más ineficientes del mundo. Con sus honrosas excepciones, nuestro país ha tenido a algunos de los perores políticos del mundo en lo que va del siglo 20 a partir del triunfo de la revolución mexicana en 1921. La sangre de cientos de miles de mexicanos en esa gesta heroica terminó en una dictadura disfrazada que duró casi 100 años. Luego pues, hemos sido gobernados por ineptos y farsantes, esa es la tradición política en México un sistema amafiado que vive de la explotación, el despojo y la rapiña ejercida en distinta intensidad en distintos tiempos sobre el pueblo de México, dando origen a una casta divina e intocable, salvo que estos mafiosos sean traicionados por sus aliados, los políticos. 

En 2018, el pueblo se cansó de este juego donde él siempre perdía y con una fuerza de 30 millones de votos, dijeron hasta aquí. Entonces surgió la esperanza de una nueva política, el problema fue que no había suficientes nuevos políticos, ni una tradición alternativa en este campo de lo público en México, salvo un pequeño grupo de la izquierda que se forjó en la lucha de resistencia al régimen corrupto, al experiencia en la administración pública de las instituciones del estado estaba en estos mañosos de la farsa y el saqueo. Esta esperanza llevó, inesperadamente hasta para sus actores, en Sayula, al depositar la esperanza compartida con todo México, en la juventud; pero se le olvidó a Sayula que las instituciones de educación púbica en México eran controladas también por políticos del mismos régimen corrupto y que uno de las instituciones universitarias más cuestionadas en este país por su opacidad y sus mafias, era la U de G. Universidad controlada por una camarilla de intereses ligados al gobierno del PRI en Jalisco, cuya cantera de nuevos políticos tradicionales era su federación de estudiantes controlada por el poder mafioso en turno en el estado, de donde salían rectores, gobernadores, diputados locales y federales, jueces y magistrados. La vieja y mafiosa a ojos visto FEG (federación de estudiantes universitarios) desde su formación, sirvió en la guerra sucia al gobierno del estado para controlar la disidencia política estudiantil y a los propios movimientos guerrilleros surgidos en los años setenta en el estado, incluso combatieron a las organizaciones estudiantiles de la UNAM que junto con su líderes y cientos de militantes fueron asesinadas por el gobierno federal en 2 de octubre de 1968; cuando estas pretendieron sumar a la población estudiantil de Jalisco a su movimiento nacional, el CGH (consejo general de huelga). El fundador de la FEG fue asesinado en esta trama de corrupción y violencia política allá por esos años, y los asesinatos de esta agrupación se conocieron con horror luego de que su edificio fuera demolido no hace poco allá por la glorieta de la normal en Guadalajara, fosas clandestinas incluidas. La FEU se formó para desparecer políticamente a la FEG por el famoso y temido Raúl Padilla rector de la U de G allá a principios de los años noventa hace ya 30 años, dándole una imagen y cara nueva a la federación estudiantil que era lo mismo pero en nueva presentación, una mafia estilo pan, de camisas impías y manos sucias. No haré el cuento largo de esta última organización estudiantil, solo le diré que, hizo la misma función de la FEG.

Bueno pues, Sayula le apostó no a un joven político y destacado estudiante de la U de G, sino a un líder de medio pelo de la FEU, educado en las formas mafiosas de estas federación que era como las fuerzas básicas en Jalisco de la política corrupta tradicional Mexicana, lo único novedosos fue que gente de esta organización estudiantil terminará como presidente de algún municipio, y no como era tradicional, como diputado local o funcionario del comité estatal del PRI, había una  protocolo que se saltó, seguramente, la propia FEU fue sorprendida con el triunfo de Daniel Carrión Calvario estudiante de derecho que ni su residencia de pasante había hecho ¿Un fenómeno de su tiempo? No, para nada, uno más de la mafia del poder, de la tradición de la política corrupta en México y Jalico. Con las mismas mañas, métodos y fines. Sayula fue estafada por su propia ingenuidad, y hasta la fecha, lo sigue siendo.