Semanario Horizontes

El poder me da vergüenza.
(Programa ciudadano de denuncia)
Parcialidad y capricho en seguridad pública.
Por: Rodrigo Sánchez Sosa.
Vecinos de la colonia Lomas del Río al sud poniente de la cabecera municipal, quienes por temor a represarías piden se omita sus nombres, denuncian la parcialidad con que los fines de semana los elementos de seguridad pública, propiamente sus mandos, el principal nuestro presidente municipal; atienden los requerimientos de seguridad de los ciudadanos. Estos vecinos, junto con otros de distintas colonias, principalmente de la periferia de Sayula y Usmajac, se quejan de la angustia que viven ante las pandillas de mal vivientes que asolan los principales barrios. En lomas del río en una finca ubicada cerca de la pista de atletismo, una familia completa de mozalbetes, semana a semana, y con la complicidad de la propia madre, arma escándalos, pleitos y borracheras en plena vía pública sin que la autoridad intervenga pese a que se le solicita por teléfono, a decir de los vecinos puede que se deba a que una de los elementos femeninos de policía es pariente directo de esta familia. El temor que ha generado esta situación mantiene a los vecinos a la defensiva, tan es así que los sábados prefieren no salir de sus casas. Mientras esta gente goza de impunidad, en el centro, los pocos policías disponibles son utilizados por sus mandos para verificar el horario de giros restringidos y acosar a los clientes de disco y bares del centro que se quedan, una vez que son echados de los antros, en el jardín principal tomándose la del estribo o planeando a dónde ir a seguirla. Precisamente a esa hora por los barrios como el mencionado, el consumo de alcohol y otras sustancias ilícitas en vía publica, la violencia y el escándalo, tiene toda la libertad para actuar y abusar del ciudadano. El número de policías recientemente mermado por razones polémicas del presidente municipal, se dedica a cuidar la moral de un puñado de gente, su vecindario, el centro (¡por ahí vive Rivas!, dicen los denunciantes, ¿cómo no?…) y las absurdas imposiciones del reglamento municipal, mientras los ciudadanos de segunda se les niega el servicio a que tiene derecho. El pulgar desaprobatorio del programa ciudadano "El poder me da vergüenza" es para el principal responsable del ridículo acoso a bares y clientes del centro y también directamente responsable de la seguridad pública en el municipio: Samuel Rivas Peña. ¡En hora buena Don Samuel! Se lo ganó a pulso.
Aclaración:
Este programa aclara que las denuncias respecto a los cursos de verano, a pesar del boletín de prensa emitido por la presidencia municipal al respecto la semana pasada, son fundadas. Los cursos fueron mal planeados y pobremente ejecutados, al parecer sólo para salir del compromiso gastando lo menos posible. La mayoría de los padres de los niños que asistieron a estos "cursos de verano" agradecieron la guardería improvisada que les mantuvo ocupados a sus niños medio día, pero definitivamente, nunca se aclaró, como lo aseguró la regidora "Chonita", que los cursos fueran meramente "recreativos", algo contradictorio. Se tiene que aceptar, esta actividad no generó el interés que debiera en las autoridades municipales, principalmente en nuestro presidente municipal, dada su falta de programación, finalidad y presupuesto. Por ello lo consideramos un mal ejercicio del poder en el municipio, o al menos mediocre.