Semanario Horizontes

Temas de Interés

Por Arturo Fernández Ramírez

La propuesta del mando único policial y la desaparición de las policías municipales

Coincidencia o premeditación, el caso es que justo la semana pasada cuando se llevaba a cabo el evento municipalista más importante de nuestro País como lo fue el 7º Foro Internacional Desde lo Local en la Ciudad de Morelia Michoacán y al que se convoca a todos los municipios de la República Mexicana y en el que se entregan los Certificados y Premios Nacionales a quienes participan en el Programa Federal de Agenda Desde lo Local.
Pues bien, justo en el marco de esa celebración municipalista en la que teóricamente su esencia es el fortalecimiento de los Municipios, Calderón aparte de haber asistido a dicho Foro Internacional a pesar de haber estado agendada su participación y que en años anteriores sí había asistido, en lugar de ello, presentó ante el Congreso su Iniciativa que tiende a desaparecer la policía municipal para dar paso al llamado mando único de la Policía a cargo de los Estados.
En otras palabras, se pretende quitar al municipio la atribución que hoy en día tiene de dirigir la Policía de tal manera que conforme a esa reforma, sea la Federación y en su caso los Estados los únicos que posean esa facultad.
Para muchos, seguramente para la mayoría, tal propuesta resulta un evidente retroceso y un atentado al Municipio como célula básica de nuestra organización gubernamental. Retroceso porque se le apuesta a la centralización en lugar de descentralizar. Y atentado porque en lugar de fortalecer al municipio como autoridad directa e inmediata hacia la población, se le mutilan sus facultades.
En la lucha histórica de los sistemas de gobierno, se considera que el centralismo no es el mejor camino para resolver los problemas sociales porque no se da una distribución equitativa, por el contrario, la descentralización es la que da mejores resultados.
Resulta paradójico que mientras en el discurso se diga que se avanza en la democracia, en los hechos se atente contra ella y contra la base de la división territorial y administrativa: el Municipio.
Si la ciudadanía no recibe un buen servicio público, ¿a quién le reclama?, ¿Al Presidente de la República?, ¿al Gobernador? O ¿al Presidente Municipal? Es inconcuso que a este último porque es al que más fácil puede ver.
En esta tesitura, el Municipio se constituye en la autoridad más importante porque es la que está en condiciones de dar una respuesta más pronta e inmediata a la población, pero, contradictoriamente, el Municipio es el que menos presupuesto recibe.
Normalmente del 100% del presupuesto que ejerce un Ayuntamiento, entre el 70 y 80% proviene de las Participaciones y Aportaciones de la Federación y del Estado, lo que demuestra que con esta dependencia económica no se puede hablar de una verdadera autonomía municipal como lo consagra nuestra Constitución Federal en su artículo 115.
De acuerdo a juristas especialistas en Derecho Constitucional y Municipal, las reformas al artículo 115 de nuestra Carta Magna hechas en el año de 1999, le otorgaron "la mayoría de edad" a los municipios, es decir, al reconocérsele como un nivel de gobierno y no solo como un órgano administrativo, se le otorgó la facultad de decidir por sí mismo y se confió en su capacidad de gobernar.
La evolución de los municipios siempre iba encaminada a su fortalecimiento, por eso muchos vieron con gran beneplácito dichas reformas del año de 1999.
Por eso, ahora que en lugar de ampliarle las facultades en la prestación de los servicios básicos, se pretende quitarle una de las más importantes como lo es la Policía Municipal, se traduce en un verdadero retroceso.
El gran problema es que todo hace indicar que ya existen negociaciones entre el PAN y el PRI para sacar adelante esta propuesta de Calderón.
Ojalá se recapacite y se dé marcha atrás al mando único policial y que no se tome como pretexto la deficiencia de los municipios para atentar contra su autonomía y facultades básicas. Lo mejor sería fortalecerlo con mejores presupuestos para que se pueda dar a la ciudadanía la atención que se merece ¿o Usted qué opina amable lector? En posteriores ediciones ampliaremos un poco más sobre este Tema de Interés.