Por Arturo Fernández Ramírez
A propósito de la cercanía para que se discutan los Presupuestos de Egresos de los diferentes niveles de gobierno Federal, Estatal y Municipal, bien valdría la pena reflexionar en torno al bajo apoyo que tradicionalmente reciben los municipios para hacer frente a las necesidades de su población.
No obstante que es el gobierno municipal el que tiene la aproximación más directa y cercana con la gente y es por ende quien recibe las demandas y reclamos en forma directa, es lamentablemente al ente gubernamental al que menos recursos se le asignan.
O al menos así se encuentran el 80% de los municipios del país, ya que son realmente pocos los que sí reciben recursos considerables.
En Jalisco podríamos citar a Guadalajara, Zapopan, Tlajomulco y otros pocos más, ya que el resto sobreviven con presupuestos raquíticos.
Y este escaso apoyo es una de las razones principales por las cuales la mayoría de los municipios no pueden atender las necesidades apremiantes de su población.
Claro está que también influye la corrupción, la ineptitud de los funcionarios, entre otros factores, para que en los municipios se realicen pocas acciones a favor de su comunidad.
Pero indudablemente el poco apoyo que se recibe vía aportaciones y participaciones de la federación y del estado, es una causa determinante para que no se puedan realizar las grandes obras y proyectos que los municipios requieren.
Y es que, por ejemplo, Sayula depende presupuestalmente del 80% de lo que le envíen la federación y el estado.
Dicho en otras palabras, del 100% de su presupuesto, tan solo el 20% lo obtiene de sus ingresos propios, el resto son vía aportaciones y participaciones de las instancias estatales y federales.
Esto demuestra, primeramente, una gran dependencia económica que vulnera la autonomía que consagra a su favor el artículo 115 de nuestra Carta Magna, porque no se puede ser autónomo siendo dependientes.
Y en segundo lugar, esta dependencia económica explica de alguna manera la fuerte limitación que enfrentan los municipios para atender en forma adecuada las demandas de los ciudadanos.
Aunado a todo lo anterior, del total del presupuesto, también aproximadamente el 80% se destina a gasto corriente, el resto es lo que se puede invertir en obras y proyectos.
Pusimos el ejemplo de Sayula, pero en realidad así están más del 80% de los municipios del país, ya que son relativamente muy pocos los que cuentan con presupuestos holgados, pero con y ello, todos sin excepción muestran rezagos significativos.
Por eso es importante que tanto el gobierno federal como el estatal dejen de ver al municipio como el patito feo, como el ente de gobierno que se tiene que conformar con lo que le envíen.
A todos debe quedar claro que en la medida en que se apoye y fortalezca a los municipios, en esa misma medida crecerá un estado y la federación, ya que al ser el municipio el último nivel de gobierno, por ser el más cercano con la población lo convierte en el nivel más importante.
En este sentido, si un municipio atiende adecuadamente a su comunidad, esta se mostrará agradecida no solo con el ayuntamiento, sino con todos los demás niveles de gobierno.
Esperemos entonces que en los ya próximos Presupuestos de Egresos del estado y de la federación, se incluyan fuertes apoyos a favor de todos los municipios, pero en especial de los que muestren un mayor rezago. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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