jueves, 28 de noviembre de 2013

La Mano del Metate
Por Hugo Rodríguez Vázquez
Lo que observamos lo ciudadanos no sólo de Sayula, de Jalisco y en general de todo el país, más allá de lo que nos pintan los medios de comunicación afines a las políticas gubernamentale$$, es la ausencia de una verdadera política social, sin duda, es lo que caracteriza al gobierno federa principalmentel. La incompetencia del gobierno se expresa en la inconformidad social, el reclamo magisterial por el despojo laboral cometido en su contra es un claro ejemplo de ello, la violencia en casi toda la República, la miseria en el campo, los jóvenes sin esperanza, el éxodo de mexicanos que intentan cruzar la frontera norte. Es muy fácil ver el efecto y combatirlo; es mucho más contundente atender las causas y buscar las soluciones de raíz a los problemas.
      Ante este panorama, lo único que ese les ocurre a los actuales gobierno es criminalizar las protestas ciudadanas. Hoy la protesta social, hasta en la ciudad de México -antes vanguardia de la participación social- es criminalizada. Sin gobiernos abiertos al diálogo, con leyes opuestas al espíritu democrático, con un congreso de papel, con líderes partidistas pragmáticos y ajenos a sus representados, poco podemos esperar a que el estatus quo cambie para bien del país.
       Lo que sí puede ocurrir -y ya por ahí asoma atisbos de insurrección-  es que los problemas se agudicen y veamos un lamentable escenario cada vez más caótico, dividido y violento, en el que las salidas no sean políticas sino simulaciones, pactos, arreglos desde la cúpula -como el pacto por México- y desdén por los verdaderos problemas sociales que hoy, como nunca, exigen una respuesta y no la aplicación de la mano dura, como sugieren violentamente algunos medios y grupos empresariales, beneficiarios e impulsores de algunas de las reformas aprobadas o en vías de discutirse o que se simule discutirse porque al final las habráb de aprobar como suele suceder con los últimos 5 sexenios al menos, pura simulaciòn de los llamados vendepatrias.
       Ese y no otro, es el actual escenario que se vive en la mayor parte de los estados de la república mexicana, algunos en auténtico campo de guerra, violencia y miseria económica como bien podríamos calificar a Nuevo León, Tamaulipas, Michoacán y Jalisco como ejemplo de violencia y a Oaxaca, Chiapas, Guerrero (entre muchos otros) en materia de pobreza extrema.
Acabamos de seudo festejar el aniversario de la Revolución Mexicana, 103 aniversario, pero preguntaríamos, ¿qué hay que festejar, si vivimos en un México en peores condiciones que las que había en tiempos de Porfirio Díaz?. Ya los priístas mafiosos y los ricos y políticos vendepatrias ya nos quieren robar hasta el petróleo, volverlo a desnacionalizar por mucho que digan que Pemex no se vende. Y en efecto, "no se vende" porque ya lo vendieron desde hace mucho. Bola de cínicos.
      Es el México de hoy, visto por todos los mexicanos, por los millones de desempleados quienes desesperados no encuentran trabajo para llevar el sustento a sus familias, por ello es que muchos deciden ingresar al gremio de la delincuencia. Es el México que ven los millones de jóvenes que se quedan al margen de continuar sus estudios al ser rechazados por las universidades, instituciones a las que se regatean más recursos para ampliar su cobertura, mientras los políticos corruptos le compran al presidente espurio un avión que cuesta 6 mil millones de pesos que para lo único que servirá  será para viajar por todo el mundo en plan de turista con la artista prestada por televisa para ser su esposa.
      Es el México que ven las amas de casa que cuando van al mercado o al tianguis, el dinero que llevan ya no les ajusta ni siquiera para adquirir los alimentos más indispensables para la comida. Es el México que ven todos los trabajadores cuando el precio de las gasolinas y del gas doméstico, sube cada  mes en forma implacable, sin contar que tienen qué pagar la renta ya que los más no cuentan con vivienda propia, la colegiatura de las escuelas privadas los que tienen la suerte de poder inscribir a sus hijos en alguna de ellas, el vestido y el calzado de los miembrios de la familia. ¿Cuál salario ajusta para todo?. Sólo el estúpido panista de apellido Cordero quien señaló que con seis mil pesos un trabajador puede pagara todo esto y hasta inscribir a sus hijos en escuelas privadas. Este pendejo, quien llegó tarde a la repartición de cerebros, diría la Chilindrina, cree que los trabajadores ganan lo que le pagan a él por hacer nada. Pero así son de cínicos además de estúpidos algunos políticos balines..  Amigo lector, seguro usted tiene al menos un poco de cordura, lucidez, inteligencia y sentido común, o lo que sea, pero estará de acuerdo en que este es el panorama de nuestro país en la actualidad, de lo contrario o no vive aquí o su opulencia  le impide validar este diagnóstico o de plano, se deja llevar por el México que nos platican las televisoras y  demás medios de comunicación- léase Televisa, TV Azteca, Milenio TV con su caterva de sedoperiodistas vendidos a los políticos corruptos. Espero que sea lo primero.
Y ya que hablamos de cínicos y metirosos
Los senadores son de tal manera
¿Amigo lector deHorizontes, No ha escuchado los mensajes en radio y televisión en donde se hace publicidad a las labores de los Senadores?....., MENTIRA, son unos embusteros. Mientras por un lado presumen sus acciones disque ciudadanas, por el otro el Senado aprieta más las tuercas a los usuarios de la banca, a los deudores pues  y con ello terminan favoreciendo a las grandes firmas que controlan esta actividad, ahora con figuras abiertamente lesivas para los deudores, como la "radicación» de estos y la "retención de sus bienes" conforme a las exigencias de cobro de las instituciones bancarias que nunca pierden y, cuando temen perder, arraigan y arrebatan. Aquí en Sayula ya hemos visto ejemplos más que evidentes de la voracidad de los bancos, constatados desalojos y observado cómo han dejado a varios conocidos vecinos de la localidad, ahora si que, -con sus tiliches en la calle- como se dice coloquialmente.
Así que, ¿cuál es la labor de los senadores quer tanto presumen en sus spots de radio y televisión y que supuestamente benefician a los ciudadanos?, por sus resultados los conoceréis, reza otro refrán, y lo que hemos visto hata la fecha es todo lo contrario. Así que, senadores, son sólo unos embusteros.


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