jueves, 14 de noviembre de 2013

PERO, LA VIDA NO SIGUE IGUAL
POR SALVADOR CARREON RODRIGUEZ
"JERRY"

Hace muchos años, pero muchos, alguien dijo "Yo soy la luz" y  aunque la había escuchado un sin número de veces no le había puesto mucha atención, hasta que vi a unos jóvenes padres entablar una lucha prácticamente con un niñito de cuando mucho unos tres años y de repente me vino a la mente esta frase "Yo soy la luz". Por un instante más observe a la joven pareja y seguí mi camino.
Al llegar a casa el incidente volvió a mi mente y con más calma llegue a la reflexión. Que importante es llegar a ser padre o madre. En este caso en particular me enfocare en el hecho de ser madre o dar "a luz" a una nueva vida.
Cuando una mujer queda embarazada, es decir cuando concibe a un hijo, en el momento en que se da cuenta, aunque su vida sigue, pero no igual, a si sea su primer embarazo o el cuarto, quinto etc. Ya sea que este casada, sea soltera, que cuente con el apoyo o la aprobación de la familia o no, que cuente con los medios necesarios para la mantención, desarrollo o educación o no, su vida ya no será la misma que antes.
Ser madre es uno de los hechos más impactante y tremendo que una mujer puede vivir. Porque desde que concibe a una nueva vida en  el interior de su vientre, sufre una  serie de cambios tanto físicos, emocionales, psíquicos y corporales lo quiera o no. Sin olvidar que aparte de todo esto, el ser madre significa una real, verdadera y tremenda responsabilidad de esa nueva vida.
Ser madre es el acto más sublime de amor, pues no solamente se trata de trasmitir la vida, sino que se trata además de trasmitirle AMOR, a se nuevo ser, la madre es la fuente donde el nuevo ser se nutre, alimenta, se desarrolla y crece, pero no solo físicamente, sino también en el nivel emocional y la más grande emoción que le puede y debe transmitirle es el Amor, y ¿de donde toma esa madre el amor para poderlo trasmitir? Lo toma de ella misma y del amor que le tramite el padre de ese nuevo ser. De ahí que esta mueva creatura debe de tener casa, alimento, vestido, asistencia medida etc. Pero sobre todo de de estar rodeado e inmerso en el amor de sus padres, porque después del nacimiento de un hijo o hija, aunque la vida sigue, nada es igual.
Pero porque lo de "Yo soy la luz" cuando hay luz se disipan las tinieblas, tomando como tinieblas, a la ignorancia o la falta de conocimiento, y cuánta razón hay, la luz representa el conocimiento, el saber, el que hacer, y por desgracia cuando somos padres, en este caso cuando se es madre, con cuanta ignorancia y falta de conocimiento se llega a ser madre y no solamente en cuanto a los cuidados que requiere el recién nacido, sino en lo referente a la educación y formación de ese recién nacido que más tarde llegara a ser un verdadero ciudadano y deberá estar, vivir y convivir en la sociedad a la que pertenece y es en la familia donde los hijos aprende e vivir y el bien convivir dentro de esa sociedad respetando y hacer que los demás también lo hagan, las reglas y normas que la sociedad nos impone para el bien convivir.  ¡Qué gran responsabilidad es ser madre¡
Gracias y hasta la próxima.      
Nota: Una disculpa por ausentarme por dos semanas, pero por causas de fuerza mayor me fue imposible, por su comprensión mil gracias.      
 



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