jueves, 28 de agosto de 2014

La Mano del Metate
Por Hugo Rodríguez Vázquez
Las cifras de la crisis desmienten los discursos del gobierno y de Peña Nieto
Las cifras económicas que evalúan dónde estamos, desmienten categóricamente los discursos triunfalistas del propio peña nieto (así en minúsculas), quien a diario nos receta él y su caterva de cerebrutos secretarios de estado, un panorama de país de avance que sólo ellos ven, porque en la realidad todos vemos a un país que se desmorona totalmente. Aquí mismo en Sayula (amigo lector) no se deje llevar por lo que le cuenten, tan sólo pregúntele a cualquier comerciante del Mercado Municipal o negocios adyacentes, cómo le ha ido con sus ventas en los últimos meses, para que se de cuenta de la real situación de pobreza a la que ya nos enfrentamos todos.  La propia Coneval, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social le pone números y cifras al verdadero México :  "en el primer trimestre de 2010 el ingreso laboral real promedio por persona al mes fue de mil 703.40 pesos; en el segundo trimestre de 2014 fue de mil 607.50 si a los ingresos laborales se les descontara la inflación. Sin embargo, se reduce a mil 516.30 si el ajuste se realiza con el valor de la canasta alimentaria. Lo anterior, debido a que en años recientes el precio de los alimentos se ha incrementado más que la inflación. Ahora dígame usted, amigo lector, ¿qué hace un trabajador padre o madre de familia con un ingreso de poco más de 1,500 pesos..?. Con este salario de miseria, no compra ni siquiera la comida de su familia, y el gas?, la luz?, la ropa?, la escuela de los hijos con las exigencias estúpidas de los directores..?. Etc..?
Ahora bien, si el punto de comparación se hiciera respecto al primer trimestre de 2005 (cuando empieza la medición), el poder adquisitivo del ingreso laboral respecto a la inflación se ha reducido 10.9 por ciento en el segundo trimestre de 2014, pero respecto al precio de los alimentos se ha reducido 31.7 por ciento. Es decir, los ingresos laborales han perdido mayor poder adquisitivo en relación con el valor de la canasta alimentaria que respecto a la inflación.  Pero los números de peña nieto, del gobierno en general, de los medios comprados Dóriga, Carlos Marín, Adela Micha, Brozo, Loret de Mola, Eduardo Ruiz Healy y demás merolicos dela televisión, son otros, allá usted si les sigue creyendo mientras el país se nos cae a pedazos.
Como colofón de este comentario, las "Rebanadas del pastel" de Carlos Fernández-Vega en su columna de la Jornada del martes que no tiene desperdicio alguno:  "Las rebanadas del pastel de Carlos Fernández-Vega en su columna de la Jornada del pasado martes 26 que no tiene desperdicio alguno : "En fin, es el México que se mantiene en movimiento (EPN dixit), pero descendente, en medio de una opulenta cena de caníbales: la economía no crece, el desempleo avanza, al igual que la pobreza (en especial la alimentaria, con todo y Cruzada contra el hambre) y la salida de capitales; con impunidad plena se roban los fondos de pensión y otros simplemente se los cargan a los bolsillos de todos los mexicanos; el Congreso se sirve con la cuchara grande, al igual que el INE, mientras el inquilino de Los Pinos compra un faraónico avión, y la iniciativa privada, de la mano gubernamental, se niega a mejorar salarios ("¡es la competitividad, hermano!). Además, los derrames tóxicos no alcanzan para que la autoridad sancione a los culpables, pero a cambio les abren las puertas al negocio petrolero… Pero no se preocupen, que ya viene el segundo Informe de gobierno, en el que sólo cosas bonitas se contarán".
Las cuotas arbitrarias en las escuelas
De poco ha servido el llamado por parte de la Secretaría de Educación Jalisco para que en las escuelas de educación básica de todo el estado no se condicione el ingreso de los alumnos por el pago de las llamadas cuotas "voluntarias", que en algunos casos son, como coloquialmente la gente dice: "voluntariamente a huevo".
Aquí en Sayula como en muchos otros  planteles de primaria actúan de manera arbitraria, en que a los padres de familia los obligan hasta a firmar una carta en la que se comprometen a pagar dichas cuotas para que sus hijos puedan ingresar a la escuela y si no la firmaban, les pedía que entonces no los llevaran para "evitarse la pena de sacarlos", como se denunció este hecho en una escuela de Tlajomulco. Puro cuento pues eso de que la SEP está al tanto de que no se cobren cuotas. Los dires hacen lo que quieren.

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