El padre Salvador Urteága
De visita en Sayula a propósito de la concelebración por el festejo de los 50 años de la coronación de la virgen de la Inmaculada, nos encontramos al padre Salvador Urteaga. Por ahí, fiel a su costumbre, tratando de pasar inadvertido, pero lo saludamos con gusto a quien muchos que ya peinamos canas como él, lo recordamos con mucho afecto ya que vivió en Sayula una época de plena identificación con la juventud de aquellos años. Estarán de acuerdo con ello, todos los setenteros -entonces jóvenes -quienes participaron junto a Salvador Urteaga en labores sociales y espirituales en Sayula en una labor pastoral, sobre todo para los jóvenes, que ahora mucho se extraña.
Banco Azteca, fraudulentos y usureros
En la nota de primera plana se puede leer la denuncia que a nuestra redacción realizaron usuarios inconformes porque este banco les hizo pagar un DINERO EXTRA por concepto de “moratoria” porque no pagaron el día señalado que era el día de los narcobloqueos y la tienda cerró sus operaciones. La pregunta resulta más que obligada : ¿Y qué culpa tenían los clientes si ustedes mismos cerraron las puertas señora gerenta...?. Como que encontraron el caminito fácil para ganar más dinero estos usureros, “cerramos la tienda y luego cobramos a los clientes por no pagar a tiempo”. Está fácil verdad..?. Como si el dueño del banco de apellido Salinas Priego que no ceja de presumir su altruismo y generosidad en su tvazteca tuviera tanta necesidad para de pilón exprimir a quienes por necesidad piden dinero prestado. Por lo pronto a los sayulenses les connminamos a ver otras posibilidades de adquirir dinero prestado, nos consta, con al menos una mejor y más respetuosa atención a los clientes que es lo que mínimamente se merecen todos.
Que la Profeco revisará las básculas para pesaje de maíz
Buena medida se comenta, pero que también dicha campaña se extienda a todas las tiendas posibles, incluídas las de los tianguis que, sabido es, dan kilos de ochocientos gramos. Las gasolinerías por favor, que de seguro estafan a todo mundo con sus litros de ochocientos también.
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