Por J. Ventura Torres
LOS GOBERNANTES POR OBLIGACION TIENEN QUE HACER COSAS BUENAS Y BIEN.
Sin lugar a dudas los gobernantes son electos por el pueblo para hacer cosas bien y buenas que beneficien al pueblo y que no dañen a la sociedad, como lo que sucede en la actualidad, en primer término se despachan con la cuchara mayor asignándose altísimos salarios, compensaciones, y una serie de beneficios económicos que se van sacando de la manga, todo lo que prometen lo hacen en forma contraria, en vez de pagar o abonar los adeudos de la nación con tantos millones de dólares que les decomisan a los narcotraficantes, los desaparecen aumentando su riqueza personal, no obstante en forma contraria piden más empréstitos avalados por el poder legislativo, teniendo al país bien endeudado y la moneda devaluada, aumentando más la extrema pobreza.
Todo mundo indefenso observa la desfachatez de los que nos gobiernan roban y roban pero no se llenan, sigue reinando la impunidad y la corrupción gubernamental, pero estos protagonistas se quieren alabar por si solos sin que la sociedad los valore, diciendo que hacen cosas buenas pues para eso fueron electos y eso es lo que realmente cuenta, no como las carreteras que presumen, es muy de seguro que estos señores ignoran que la ciudadanía se da cuenta que es una verdad que hacen las carreteras con dinero del pueblo, y que al estar terminadas las concesionan, ¿en dónde quedo lo bueno?, ya que quienes las usen tienen la obligación de pagar según los kilómetros y las tarifas que se asignan.,
La realidad de las cosas es que la sociedad se encuentra hasta el hartazgo, con tantas mentiras y falsedades de parte del ejecutivo Enrique Peña Nieto, con esa forma de actuar nos da a pensar que puede ser muy de seguro que privatizar el IMSS, y el ISSSTE, y aumentar descabelladamente los combustibles, la energía eléctrica, la devaluación de nuestra moneda, el hurto de todos los decomisos millonarios en dólares y otras monedas a los integrantes de los carteles que son privados de su libertad, prometer al pueblo que al ser aprobadas la serie de leyes entre ellas la energética bajarían los precios de todos los combustibles y la energía eléctrica y el resultado lo estamos viviendo con mayores aumentos, así mismo puede ser muy de seguro que también todo esto cuenta para lo bueno del ejecutivo de la nación.
Es lamentable observar como el poder legislativo ignora y se olvida que son los representantes del pueblo, pero a cambio venden el silencio, en muchos miles de pesos se amordazan, y les asignan bonos, aguinaldo inflado económicamente, y quien sabe que cosas más, pero el resultado final es que el pueblo resulta desprotegido y en tremendo estado de indefensión.
Se presume la generación de empleos, pero no se dice que los empresarios que traen industrias vienen a explotar la mano de obra barata de los mexicanos.
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