¿UN GOBIERNO CON AUSTERIDAD?
Por Mariana Preciado
Durante varios años un reclamo total de la ciudadanía es la vida de exceso de los diversos funcionarios públicos, así como una cantidad de gastos innecesarios en el ejercicio del poder público. Es por ello, que la última contienda electoral genero un gran discurso la austeridad en la mayoría de los candidatos a cualquier cargo de elección popular.
Recordando que la austeridad lejos de ser un discurso en temporada electoral, debería de ser una realidad en cada Ayuntamiento y en cada organismo y/o ente de gobierno. Pues los diversos excesos que se pueden generar repercuten en cada ciudadano.
A lo cual me gustaría ilustrar con el siguiente relato: Un jefe de familia además de pagar la mensualidad del colegio de su pequeño hijo, le contrata un maestro particular para que le ayude a hacer sus tareas y además le contrata una niñera. Sin embargo, las finanzas que tenía la familia eran complicadas y cada vez gastaban más de lo que ganaban, entonces al tener otro gasto extra en el hogar, disminuye la cantidad de dinero con la que quizás todo el resto de su familia tiene que alimentarse durante todo el mes.
Algo similar sucede cuando tenemos un gobierno con derroche de recursos públicos, en la cual como es sabido, Sayula no tiene una gran cantidad de ingresos propios, sino la mayor parte proviene de Gobierno Federal y Estatal, entonces el mal emplear ese tipo de recursos afecta a los Sayulenses puesto que proyectos como comedores comunitarios, transporte escolar o inversión en reforzar la seguridad pública se ven impedidos y obstaculizados debido a la falta de dinero.
Y al referirme del municipio, es porque en realidad no tenemos un gobierno austero, se perfectamente que en estos momentos estimado lector dirá: Pero hubo una reducción de salarios al 50% del presidente y regidores. Tranquilos, es cierto, si bien se redujo el salario, hay algo que no debemos de perder de vista.
No puede haber tal austeridad si se siguen manteniendo nóminas demasiado obesas, es decir, con bastante personal, puesto que de nada serviría que la reducción existe si de todas maneras existen funcionarios que se les subió el sueldo o más servidores públicos dentro de la nómina, ya que estaríamos hablando que se mantienen gastos similares a la administración anterior.
El ejemplo más significativo pudiera ser que tenemos un síndico, cuya función es representar legalmente al municipio sin embargo tenemos a otra persona que se encarga de lo mismo, generando dos sueldos y una misma función. Quien por cierto nos recuerda a la administración encabezada del Dr. Jorge González, ¿usted recuerda? ¿Acaso no por eso nos molestábamos?
De manera general, el gobierno municipal de Sayula bajo ningún motivo debe ser un mecanismo para cumplir compromisos o pactos que generaron los políticos con sus amigos, la nómina que tenga el ayuntamiento en realidad debería de ser con los mejores perfiles para tales funciones, sin caer en una sobre nómina, porque finalmente esos gastos impiden al crecimiento del municipio, ya que esos recursos se gastan en sueldos y no en proyectos que pueden beneficiar a todos.
Aunque quizás algo desalentador también es que existen diversos funcionarios que no son del municipio con puestos de gran compromiso y relevancia, dejando a un lado el talento Sayulense o la capacidad que muchos tienen, donde desde mi particular punto de vista considero que los ciudadanos y las ciudadanas del municipio tienen bastante potencial, además de ¿Quién mejor que los Sayulenses para buscar el bienestar del pueblo? Puesto que todo Sayulense ama a su municipio y todos absolutamente todos queremos ver un Mejor Sayula.
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