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Por Arturo Fernández Ramírez
"Sin control efectivo el dengue y la influenza"
Por más que se quieran maquillar las cifras, los resultados parecen ser contundentes sobre estas dos enfermedades que están azotando a nuestra entidad federativa. Nuestro municipio por supuesto tampoco está exento de estas epidemias, ya que se han registrado diversos casos.
La reciente renuncia del polémico Secretario de Salud del Estado comprueba que no se estaba actuando como debía ser para enfrentar con eficacia la propagación de estas enfermedades mortales.
Cabe señalar, tal y como lo han hecho los actores políticos del Estado, fue muy tardada la salida del hoy ex Secretario de Salud, porque en realidad desde hace meses debió haber renunciado a su cargo porque no solo había mostrado incapacidad para conducir con resultados palpables hacia el exterior a esta dependencia, sino que internamente también fue causa de un caos entre el personal de la Secretaría. Ni como patrón ni como funcionario dio buenos resultados. Su único mérito era ser muy allegado del Gobernador.
Alfonso Petersen, hoy ex presidente municipal de Guadalajara, de donde se retiró antes de concluir su mandato y después de una gran derrota en su proyecto de la Villa Panamericana, se constituyó en el nuevo Secretario de Salud, de donde a su vez había salido para irse a disputar la presidencia de Guadalajara.
Si como ejecutivo no tuvo la capacidad de poner orden en el ayuntamiento, vamos a ver ahora si como Secretario puede reivindicarse con la sociedad, después de todo cuando anteriormente ocupó este mismo cargo no hubo evidencias de no poder con el mismo, por eso puede tenerse la esperanza que realmente rinda frutos y llegue a controlar con acciones inmediatas producta de su experiencia, las enfermedades que hoy nos tienen en jaque.
Y vaya que sí se requieren acciones inmediatas en el rubro de salud porque, insisto, el problema es mas grave de lo que de manera oficial se ha reconocido.
Para empezar, Jalisco ocupa ya el primer lugar a nivel nacional en caso de dengue.
En segundo lugar, aunque la Secretaría de Salud confirma 1,649 casos, otras fuentes como el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica reconoce que existen más de 15 mil casos probables de infectados, según lo ha expresado el rector del Centro Universitario de Ciencias de la Salud de la Universidad de Guadalajara, Víctor Manuel Ramírez Anguiano.
Resultan muy distantes una cifra de otra y aunque en el fondo ambas pueden ser ciertas, ya que una se refiere a casos confirmados, la otra comprende los probables casos, es decir, que aún cuando pueden no estar confirmados, los síntomas apuntan a que sí se padece dicha enfermedad.
Luego entonces, lo que debe ponderarse es la magnitud real del problema y esta se determina con mayor precisión tomando como base al grado de infección, es decir, incluyendo los casos probables y no únicamente tomar como referencia lo que ya está porque ante una epidemia el problema es su propagación y no únicamente el daño que ya se causó.
Se debe entonces partir de lo que en realidad está sucediendo, partir de los casos probables y que estos definitivamente pueden multiplicarse generando una epidemia de grandes magnitudes que salga de todo control.
No se trata de engañar con cifras que representen verdades a medias y que la ciudadanía no actúe conforme a la gravedad del caso.
Es entendible que se mantengan reservas para no crear pánico en la población, pero no se justifica que se engañe con cuestiones alejadas a la realidad y mucho menos que se sigua actuando con ligereza, ineficiencia e ineptitud como parece ser lo han hecho hasta el momento nuestras autoridades sanitarias. Y esto no lo dice un servidor, lo dicen las cifras reales, lo dice el número de personas que han muerto, el alto número que están infectadas y el inminente riesgo de que esto se propague sin control. Esperemos que se actúe con responsabilidad. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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