Semanario Horizontes

La viga en el ojo propio....
(Sergio Mejía).-Se ve claramente que el ataque hacia la hermana República de Cuba es por demás sistemático. Se nota obviamente que es una orquestación recurrente de cada cierto tiempo para desprestigiar aún más a los gobernantes cubanos.
Últimamente se ha hecho resaltar la muerte por ?huelga de hambre? de un supuesto luchador por los derechos humanos en Cuba, la bella; y se le sigue dando cuerda a otro disidente que está haciendo lo mismo que su antecesor, que protesta, igual que el ya difunto, porque se liberen a los presos de conciencia en la mayor de las antillas. Los medios informativos del mundo occidental proclives al imperialismo yanqui, como son aquí las televisoras TV Azteca y Televisa entre muchos otros, que están a la orden del día promocionan inmediatamente la supuesta violación a los derechos humanos en Cuba, sin ver primero la viga en el ojo propio, pues de todo lo que afirman que pasa en la isla caribeña, en sus cárceles y sistema de vida, en realidad no se diferencia mucho que digamos del común denominador de lo que pasa en nuestro país y demás países latinoamericanos y de otras partes del mundo. ¿Hay alguien de ésas plumas o reporteros balines de las televisoras que hayan dicho algo sobre las mujeres indígenas queretanas presas porque supuestamente ?secuestraron? a unos policías federales? Una cosa por demás incongruente. Imagínese amigo lector. Ya mero unas mujeres iban a ¿secuestrar? a individuos armados sabiendo cómo se las gastan dichos acólitos del diablo. Si ni siquiera aceptan que se les pregunten quiénes son o que se identifiquen al menos, mucho menos mirarlos a los ojos. Así que ya mero los iban a ?secuestrar? unas mujeres, e indígenas, además. ¿Y los derechos humanos que tanto reclaman en la isla cubana, dónde quedan respecto a esto?
Pero, ¿por qué hacerle el juego al imperialismo yanqui que después del derrumbe a las torres gemelas en Nueva York (auto atentado), en ése mismo país se violan las más primordiales garantías individuales con el pretexto de su ?seguridad nacional?? ¿Es ético que en un aeropuerto se tengan que quitar hasta los zapatos los pasajeros para revisión? ¿Por qué seguirle el juego al más violador de los derechos humanos, los USA, acosando a Cuba? ¿Y los presos de la isla de Guantánamo?. Aquí mismo en México, hay cientos de presos de conciencia, pero de esto nada dicen los que ahora se rasgan las vestiduras con los presos de Cuba. Bola de hipócritas.
Las plumas mexicanas al servicio de los gringos tachan de asesinos y criminales a los hermanos Castro Ruz; sin embargo, ni Fidel ni Raúl podrían ser más criminales ni asesinos que George Bush, hijo y padre, mucho menos que Harry Salomon Truman (judío por cierto) que ordenó que lanzaran la bomba atómica sobre Hiroshima y Nagasaki; menos que Lyndon B. Jhonson o cualquiera otro presidente norteamericano gringo contemporáneo. Es muy común que ésas plumas critiquen sobre las ¿jineteras?, sobre la pobreza y el hambre de la isla antillana; que los anaqueles de las tiendas estén semivacíos, etcétera. Y sobre todo resaltan la crueldad e inhumanidad en las cárceles cubanas. Sin embargo, al señalar lo anterior pareciera que se están refiriendo a lo que pasa en nuestro propio país y aún en los propios Estados Unidos.
Pero para qué ir tan lejos, si en nuestro propio país hay niñas que venden su cuerpo por hambre; los hacinamientos en las cárceles son infrahumanos. Hay etnias que se están muriendo de hambre y frío y nadie les tiende la mano, como los Rarámuris, mal llamados Tarahumaras, seres olvidados de la mano gubernamental de todos los tiempos. Una realidad que no se puede ocultar es que en proporción, en nuestro país habemos más ignorantes y analfabetas que en la hermana República de Cuba, y que sufrimos más represiones de todo tipo además. No todos los mexicanos nos podemos dar el lujo de viajar, ya no digamos al extranjero (a menos que sea de mojados, con su respectivo riesgo, a buscar el sueño americano), sino ni siquiera en nuestro propio país, estado o municipio. Aquí, los anaqueles de las tiendas de los súper mercados, tiendas de auto servicio a departamentales lucen llenos de mercancías; sin embargo, el poder adquisitivo de muchos de nosotros deja mucho qué desear, por lo que nada más nos la pasamos como el chini ?nomás milando?, y de nada sirve para el grueso de la población que haya muchas mercancías si la mayoría de los mexicanos no las podemos adquirir. Así que, ¿sirve de algo criticar a Cuba sin criticarnos primeramente a nosotros mismos? Estamos iguales o peor de todo lo que se critica de Cuba.