miércoles, 26 de mayo de 2010

Sobre Militarización México y América Latina
Maya Piedra 

Cuando los militares son puestos en las calles, los pueblos que habitamos en territorio latinoamericano sabemos lo que esto significa: desde Centroamérica hasta el cono sur (Guatemala, Salvador, Colombia, Chile, Brasil, Argentina...), miles de mujeres y hombres aun recordamos a nuestros hijos, hermanos, cuñados, esposos que fueron: muertos, desaparecidos, torturados y presos políticos por las dictaduras militares en el continente. 
¿Cuál fue el objetivo de la militarización? Latinoamérica en los años 50s y 60s, después de bastas luchas sociales, logro insertarse en interesantes procesos de democratización nacional, los pueblos llevaron al poder a gobiernos que fueron abriendo caminos para que la gente contara con subsidios a servicios básicos: agua, luz, gas, artículos de primera necesidad y asistencia social; un basto porcentaje de la población accedió al sistema de salud y educación pública; se nacionalizaron las principales fuentes de riqueza como el petróleo y la minería. Sin embargo desde la perspectiva de la iniciativa privada trasnacional, dichos cambios no se acogieron con agrado, puesto que los espacios dentro de nuestros países para quienes ostentan un interés meramente capitalitas paulatinamente se les fueron cerrando, perdiendo así la consiguiente posibilidad de: mercantilizar sus productos, adquirir mano de obra barata y explotar los recursos naturales. La riqueza Latinoamérica se dirigió hacia la gente, por lo tanto el acaparamiento de recursos por el capital privado se vio gravemente obstaculizado, antes tales hechos la respuesta no se hizo esperar. 
Para ejemplo tenemos el caso de Chile, donde el gobierno de Allende en los años 70s expropio al capital estadounidense: minería, telefonía y la banca. Acto seguido los capitalistas norteamericanos gravemente indignados por la fuerte reducción de sus ingresos resultado de la expropiación, conformaron el llamado: Comité Ad Hoc de Chile, en Washington. Integrado por las principales empresas mineras estadounidenses; la compañía Telephone and Telegraph Company (ITT), quien poseía el 70% de la telefonía chilena y otras como: Purina, Bank of America y Pfizer Chemical. 
El Comité Ad Hoc de Chile como respuesta hacia el gobierno y el pueblo chileno, junto con el entonce gobierno gringo Richard Nixon, respaldado por el secretario de estado Kissinger y completamente parados en la doctrina de libre mercado, ideada por el economista de la escuela de Chicago Milton Friedman, maquinaron el golpe de estado, impusieron una dictadura militar con el gobierno de Pinochet y convirtieron a chile en un centro de experimentación hacia el modelo de desarrollo neoliberal. Una vez instaurados los regimenes militares en America Latina; los resultados fueron desastrosos: privatización de empresas estatales; especulación financiera; importación extranjera; recorte al gasto publico, excepto el gasto militar; eliminación de control de precios. 
La dictadura Chilena diez años después había rematado cerca de 500 empresas y bancos estatales; redujo 50% el gasto publico afectando principalmente a salud y educación; elimino las barreras arancelarias; las familias con salario mínimo destinaban el 74% de sus ingresos para comprar únicamente pan por lo que tenían que prescindir de lujos como leche y pasajes de autobús; se quitaron entre otros el programa de leches escolares y para 1986 uno de cada cinco trabajadores de la industria, estaba desempleado.
¿Y México?
México inserto en un proceso social distinto, se instala en la era neoliberal, en el año de 1994 con la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio. Y bajo la administración de Carlos Salina de Gortari, se aprueban una serie de leyes que permiten el desmantelamiento del Estado Nación: aguas, tierras, bosques, hidrocarburos, minería, costas y semillas se colocan en el mercado financiero transnacional, y se echan a andar mega proyectos multimillonarios: carreteras, presas, corredores interoceánicos, turísticos e inmobiliarios. 
Ahora lo que tenemos es la minería en manos de empresas Canadienses, Walt Mark fulminando mercados locales; vías y medios de comunicación privatizados en manos de Carlos Slim, los Hank González, con la más altas tarifas a nivel mundial; la Banca en manos de empresas españolas; granos básicos importados de EU; encarecimiento de la tortilla, impuestos para artículos de primera necesidad; el corporativo Coca Cola intentando apropiarse de los mantos acuíferos; Monsanto desmantelando la agricultura local; altos índices de desempleo y más.
Ante el contexto social que vive la población en México, la inconformidad crece. Y… los militares salen a las calles…
Bajo el presente panorama en 2006, el gobierno de Calderón decide militarizar el país argumentado una guerra contra el narcotráfico. Sin embargo sobre al tema Carlos Fazio en su texto paramilitarización hace referencia a un análisis realizado por la Sedena en 2008, titulado: "La secretaria de Defensa Nacional en el combate al narcotráfico", donde se habla de una cruzada nacional de tipo contrainsurgente, donde los objetivos para aniquilar son los grupos armados desafectos al gobierno...
¿Qué pasa cuando los militares andan sueltos por la calles en un Estado de ilegalidad, donde la población está inconforme? La historia de América Latina y la impunidad con la que el gobierno mexicano actúa en estos momentos, nos lo revela. 


Información tomada del libro de Naomi Klein, la Doctrina del Shock

Carlos Fazio, artículo publicado en la jornada "Paramilitarismo"

No hay comentarios:

Publicar un comentario