Semanario Horizontes

La verdad sobre el aumento al precios de los cigarrillos

El pretexto principal para aumentar el precio de los cigarrillos es que supuestamente el gobierno federal gasta mucho dinero en la salud de los fumadores.
Sin embargo, si en verdad le preocupara a la actual administración panista, así como a los legisladores que aprobaron dicho aumento al tabaco la salud no nada más de los fumadores, sino de todos los habitantes del país, enfocarían sus baterías a fortalecer al Sector Salud en todos sus niveles, a que sus hospitales, clínicas y demás instalaciones fueran de lo mejor; que jamás faltaran medicamentos ni materiales de curación, que la atención a los derechohabientes fuera lo más expedita posible, más personalizada, atenta y honrada; que tanto el personal de médicos y enfermeras (se engloban ambos géneros desde luego) fuera seleccionado en base a vocación de servicio y no por compadrazgos, parentesco o amistad, además de tener el máximo suficiente de personal para que la demanda de servicio no los abrume y que por lo mismo estén constantemente estresados y por ende malhumorados, ya que por eso se puede decir que quien paga esos estados de ánimo del personal médico son los pacientes. Pero está comprobado que no es así, pues cada vez que se genera una crisis económica, la primera dependencia gubernamental que sufre el recorte presupuestal es el de Salud, seguido por el de Educación o viceversa.
Así que no es en realidad por la salud de los fumadores por lo que se aprobó el aumento a las cajetillas de cigarrillos, supuestamente a partir del año entrante, sino porque la actual administración no tiene llenadera, así como la demás caterva política que mientras más tienen más quieren. Todo esto no es más que una carga impositiva más, pues la mayoría de los políticos ya no hayan cómo esquilmar aún más a la población. No contentos con aumentar el dichoso IVA, hoy van por más gravando el tabaco; y tal y como van las cosas, se ve que ya vamos cayendo en una etapa más de Antonio López de Santana, porque al parecer ya no tardan en cobrar impuestos por puertas y ventanas, así como por mascotas y posiblemente hasta por pares de zapatos que tenga cada uno de los habitantes, probablemente hasta los menores de edad. Todo para que sigan gozando los políticos de unas prebendas humillantes para la mayoría de la población, mucha de la que ni en un año ganaría lo que gana un diputado o senador en un mes, mucho menos pensar lo que ganan los magistrados de la dizque Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Ahora bien: El supuesto chantaje de las compañías tabacaleras que dizque han amenazado con abandonar sus inversiones en el país por el dichoso aumento a su producto, no es más que puro ruido para crear una imagen de estar aparentemente en contra de la medida tomada por los dizque representantes del pueblo, ya que con el aumento dichas tabacaleras ganarán más, así se les cobre un arancel por el tabaco importado, ya que los fumadores no se acabarán nunca; el vicio a la nicotina es canijo, por lo que pasará lo mismo que con las bebidas alcohólicas que por más caras que estén, la gente se sigue embriagando, principalmente la de escasos recursos, desgraciadamente, pero así es.
Así que con el cigarrillo pasará lo mismo: mucha gente seguirá gastando en sus cajetillas por más caras que estén, desafortunadamente, y esto será un gravamen más pero al bolsillo de la población fumadora que posiblemente al principio y mientras pasa la tempestad deje de comprar una o dos cajetillas de cigarrillos menos, pero ya una vez habituado, seguirá con su mismo ritmo fumador.
Sin embargo, también están las generaciones futuras que nada más están esperando cumplir la mayoría de edad para poder comprar por sí mismos sus cigarrillos, aunque antes de que ello ocurra se dan sus mañas para traer sus cigarrillos en la bolsa. ¿Cómo le hacen? ¡Quién sabe!, pero como se dice comúnmente: “para todo hay maña”.
Y a propósito de tabaco importado, está claro que el estado de Nayarit es uno de los más afectados por las medidas adoptadas en contra del tabaco, ya que Nayarit se ha distinguido por ser uno de los principales productores de la solanácea, pero que por lo mismo ha visto muy reducida su producción afectando a miles de campesinos y por ende a cierta región productora de la aromática planta.
Y si la producción nayarita se ha reducido y la cantidad de fumadores aumentado, entonces quiere decir que se le ha estado dando preferencia al tabaco de importación y, si se sigue importando, por lo mismo se deduce que ese es el meollo del asunto. Pero en fin. Sea pues. Vale. (Sergio Mejía Cano).