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El Centenario de la Revolución Mexicana

Justo para este sábado 20 de noviembre se estará celebrando el Centenario del Inicio de la Revolución Mexicana, un acontecimiento histórico por sí mismo y más en esta ocasión en que se cumple un siglo.
Y como ya lo hemos mencionado en más de una ocasión, más allá de la situación actual de nuestro País, más allá de que la riqueza nacional siga acaparada en unas cuantas manos, más allá de que nuestras condiciones económicas, políticas y sociales no sean las que se supone trajo consigo el triunfo de la Revolución; aún así vale la pena recordar y conmemorar el inicio de un movimiento armado que convulsionó durante casi una década a nuestra Nación y en el que se derramó sangre y cobró muchas vidas.
En efecto, el hecho de que hoy en día las condiciones de vida de la inmensa mayoría de los mexicanos no sea muy diferente a la que vivían los que padecieron la dictadura de Porfirio Díaz, no es ni debe ser obstáculo para ignorar o pasar desapercibido un movimiento que cambió el rumbo de nuestro País.
Como también lo hemos expresado, la historia se escribe día a día, de tal manera que hace 100 años Madero, Villa, Zapata, los hermanos Flores Magón, Carranza y tantos otros revolucionarios mas, hicieron lo que consideraron necesario para acabar con un régimen que no atendía las demandas sociales.
Las preguntas que surgen ineludibles son ¿qué estamos haciendo nosotros para que las cosas mejoren? Porque es fácil criticar y decir que todo está mal, pero, ¿qué hacemos como mexicanos?
¿Cuál es la lucha que estamos librando?
Si la situación no está como nosotros queremos ¿Qué tanta culpa tenemos nosotros mismos? De la Revolución nació la Constitución en la que se plasmaron las tres principales conquistas: educación, tierra y justicia labora.
Cuando se promulgó nuestra Carta Magna fue considerada como una de las mejores del mundo, sobre todo vanguardista en el concepto de justicia social, dejando atrás el individualismo que caracterizaba al liberalismo de la Constitución de 1857.
Pero ¿qué falta entonces? La respuesta es simple: que se cumpla lo ahí preceptuado. ¿Y quién debe hacer cumplir los mandatos constitucionales? Aunque pareciera que debemos responder que las autoridades, creo que la respuesta más certera es que cada uno de nosotros.
En fin, como mexicanos así como celebramos en su momento el Bicentenario de la Independencia Nacional, así mismo debemos celebrar el Centenario de la Revolución Mexicana.
Debemos rendir el justo reconocimiento a quienes dieron su vida por un México mejor, a quienes tuvieron el valor de iniciar o sumarse a un movimiento que transformó a nuestra Nación. Y si la justicia social aún no ha llegado a la inmensa mayoría, corresponde a las generaciones presentes hacer lo propio, ¿O usted qué opina estimado lector. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com