jueves, 17 de noviembre de 2011

Gasto en represión

(Por Enrique Ibarra Pedroza).-En su sesión de hoy la Cámara de Diputados aprobará con los votos del PRIAN, el presupuesto de egresos de la federación del 2012. El gasto será de 3 billones 647 mil millones de pesos. De ellos 2 billones 174 mil millones serán para gasto corriente, esto es, salarios, prestaciones de servidores públicos, renta de inmuebles telefonía celular y adquisición de vehículos de los altos mandos, entre otros rubros. Esta cifra muestra claramente la ausencia de políticas de austeridad en el gasto, ya que su incremento es de casi 200 mil millones de pesos. Al igual que en los años anteriores, Calderón en su proyecto de presupuesto dedica los aumentos más altos a las áreas vinculadas a las tareas de seguridad. Propuso para la Sedena, Gobernación, Marina, PGR, Policía Federal y el Fondo de aportaciones para el fortalecimiento de los municipios y el Distrito Federal (en ese tema) un total de 162 mil millones de pesos. El incremento aumento en números absolutos en esas secretarias es de más de 23 mil millones.
Es inocultable que en lo que va del gobierno calderonista las áreas vinculadas a la represión han sido las más atendidas en el presupuesto. En el 2007 se destinaron 71 mil 116 millones de pesos. Los más de 160 mil millones que se les destinarán el próximo año representan un incremento del 128 por ciento. En contraste las áreas destinadas a materias tan sensibles como la educación, ciencia y tecnología y salud han tenido apenas los incrementos correlativos a los índices inflacionarios.
Es más para el próximo año Calderón plantea una disminución de 15 mil 890 millones de pesos en carreteras puentes y caminos; 12 mil 209 millones de pesos menos para el campo y 5 mil 980 millones de pesos para programas del medio ambiente. Otros rubros que registran disminuciones son los de FONAHPO, programas de atención a pobreza urbana, Liconsa y Diconsa, entre otros.
Por ello es lamentable que el prianato convalide el gasto represivo de Calderón, pese al evidente fracaso de su política de combate a la delincuencia como lo acaba de dictaminar la Organización Human Rights Watch. Es lógico también que los diputados afines a Morena lo votemos en contra.

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