Personajes....de Sayula
Por Hugo Rodríguez Vázquez
Tenemos en Sayula, desde hace muchos años entre nosotros, al menos por más de cuatro décadas y media a la fecha, a un ruiseñor con una voz extraordinaria y que de seguro muchas personas no saben de su existencia. doña Otilia Sánchez Martínez viuda de Villaseñor esposa del extinto maestro y odontólogo de gratos recuerdos el doctor Conrado Villaseñor.
Si, pocos saben que doña Otilia formó parte del Trío del Recuerdo que en sus mejores momentos de juventud llegaron a actuar en reconocidos centros de espectáculos en la ciudad de México, como el Hotel Hilton por ejemplo, por ahi por los años sesenta y hasta llegaron a tener su programa de televisión en el Canal 2 en la barra matutina donde cantaban acompañadas del destacado pianista Chucho Martínez Cárdenas quien a su vez se desempeñaba como su representante artístico.
En entrevista con Horizontes, doña Otilia desgrana parte de sus recuerdos en la quietud de su casa ubicada por la calle Vallarta de Sayula, donde vive con su hija Mónica, rememorando el lugar de su nacimiento que dice, fue en Tamazula, Jalisco en el año de 1928.
Hija de don Pedro Sánchez Velasco y de doña Hermelinda Martínez Chávez, desde muy niña, apunta, le gustó el canto al igual que a sus hermanas, «eramos seis hermanas y desde muy niñas nos gustó al canto a todas», subraya, cantando entonces en el coro de la iglesia de Tamazula al pie del altar de la Virgen de Sagrario de esa poblaciòn.
Tras emigrar poco después a la ciudad capital, junto con sus hermanas María Inés y Victoria, integraron el Trío del Recuerdo del que ya mencionábamos, tuvo por momentos enorme éxito interpretando sobre todo las canciones más románticas de los tríos y de la època que sonaban en esos años, se podría decir, aún dentro de la època de oro de la música romántica de México, logrando grabar un disco de larga duraciòn que conserva doña Otilia hasta la fecha.
Lamentablemente, recuerda, abandonaron a su representante artístico cuando se dieron cuenta de que las estaba explotando y poco después el trío se desintegró cuando ella y sus hermanas tomaron caminos diferentes como es natural en esta vida.
Fue en la ciudad de México, recuerda, donde conoció a quien sería su esposo el Dr. Conrado Villaseñor con el cual casó en septiembre de 1964, para poco después, en 1967, arribar a Sayula donde quedó a vivir desde entonces. El Dr. Conrado Villaseñor murió el 14 de noviembre de 1990, destacándose como profesionista en odontología y maestro de varias generaciones en la Escuela Preparatoria.
El que esto escribe tuvo la suerte de escuchar a doña Otilia en reuniones familiares y de amigos en veladas y tertulias por lo demás agradables porque todos esperaban el momento en que el Dr. Villaseñor tomaba la guitarra para acompañar a su esposa.
Poseedora de una voz aterciopelada, era un deleite escucharle los èxitos de Lupita Palomera, como Incertidumbre de Gonzalo Curiel, que si me apuran, nada le pedía en calidad a la Palomera la voz de doña Oti.
Aunque se le nota el cansancio de los años, todavía doña Oti, al inquirirle si todavía recuerda sus años de gloria en el canto, señala con alegría : «Todavía canto, cuando me piden cantar aún les canto todo lo que quieran..»
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