Por Arturo Fernández Ramírez
De acuerdo a la información oficial que han emitido las autoridades de salud, siguen latentes los riesgos de infección de la influenza, por ello es importante extremar precauciones.
De hecho, se considera que hoy en día nos encontramos en circunstancias más graves que las que se vivieron en el año 2009 y sin embargo, las medidas que se tomaron en aquella fecha y las de estos momentos, son muy distantes.
Lo que resulta paradójico es que en el año 2009 las medidas que se adoptaron fueron más extremas que las que hoy se están tomando.
Incluso, si recordamos, hasta hubo suspensión de clases en todos los niveles, incluyendo nivel superior. Las campañas políticas iniciaban y hubo muchas limitantes para su realización. Se prohibieron todos los actos masivos.
En fin, hubo muchas medidas que simplemente hoy no se han visto a pesar de que como se ha dicho con insistencia, todo hace indicar que las circunstancias actuales son más graves que las de 2009.
Aunque también no podemos pasar por alto las grandes dudas que en aquella época se generaron en cuanto a si realmente era tan alarmante la situación o simplemente se trataba de un distractor más del gobierno federal.
Y es que como ya en varias ocasiones ha pasado (chupacabras, supuestos náufragos, entre otros casos) el gobierno utiliza lo que sea con tal de distraer al pueblo de lo que realmente debe interesarle o con el fin de que no se dé cuenta de lo que el gobierno está haciendo.
Por eso, en el año 2009 muchas voces críticas pusieron en tela de duda que realmente se estuviera viviendo una situación tan grave que ameritara todas las medidas extremas que se estaban tomando.
Pero bueno, al margen de lo anterior, vamos a pensar que las cifras, datos e información oficial que ahora nos alertan sobre el contagio de la influenza son reales y por lo tanto, es preferible tomar medidas que al final de cuentas en nada afectan, tales como el usar cubrebocas o gel antibacterial. Es entonces importante que todos colaboremos para evitar que más personas se enfermen de la influenza, a nadie nos conviene.
Empero también es necesario que el gobierno cubra realmente con el abastecimiento de las vacunas respectivas, ya que aunque dice hasta el cansancio que sí existen estos antídotos, la realidad que se vive en los centros de salud es otra.
En efecto, quienes acuden a los hospitales y centros de salud, simplemente se regresan como llegaron: sin vacuna porque el argumento es el mismo: está agotada.
Ojala entonces que el gobierno cumpla con esa parte y nosotros con extremar precauciones y más si en casa tenemos a personas ubicadas en los grupos más vulnerables, es decir, si tenemos a niños, adultos mayores o enfermos.
En las manos de todos está evitar que se siga propagando la influenza y que siga cobrando más vidas. Manos a la obra entonces. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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