Por Arturo Fernández Ramírez
Es la pregunta recurrente que el grueso de la población se hace muy a propósito de la masiva publicidad que el gobierno desplegó para "convencer" al pueblo de México de que sí convenía dicha reforma energética.
Y obviamente la principal propaganda que se utilizó fue precisamente la que sirve de título a esta columna: con la reforma energética bajará el precio del gas, gasolina, energía eléctrica y quien sabe que tantas otras cosas prometieron bajar.
Todas estas promesas se hicieron con la evidente intención de evitar que creciera el descontento social.
Era necesario engañar una vez más al pueblo de México para "apaciguarlo", para evitar más brotes de violencia, para evitar que más sectores sociales se sumaran a las marchas y protestas que aunque no se vean en la televisión (léase el duopolio televisivo) son reales, existen y crecen también cada día más.
Por eso después de que se consumó la reforma energética o mejor dicho la privatización de PEMEX, el grueso de la población, sobre todo los más marginados económicamente hablando, se preguntan cuándo bajarán los precios del gas, de la gasolina y de la luz eléctrica.
Y es que por el contrario, en lugar de bajar los precios, aumentan. Los gasolinazos no han dejado de parar y mes con mes este combustible sigue costando más.
Siendo realistas, creo que en pocos meses sí podrían darse en apariencia algunos mínimos descuentos, concretamente a finales de este año o de seguro en el próximo.
La estrategia, aunque burda y grotesca, está más que clara: en estos momentos seguirán aumentando estos productos y servicios para después en un engaño más al pueblo de México, simular que se bajan de costo.
Y obviamente todo esto se dará en el marco de las elecciones intermedias del próximo año en donde se renovará la Cámara de Diputados Federal.
Al PRI desde luego que le interesa tener el control pleno de dicha cámara, sin necesidad de estar negociando con las otras fuerzas políticas.
Por eso aprovechará el desgaste del PAN que está sufriendo las consecuencias de la pérdida del poder. Sigue en picada este partido.
También el PRI va a pretender sacar provecho de las bifurcaciones que se han generado en las fuerzas políticas de izquierda, la creación de un nuevo partido por el dos veces candidato presidencial López Obrador, no es cosa menor, ya que sectores de los otros partidos de izquierda como PRD, PT y Convergencia, resentirán la salida de cuadros significativos.
Y frente a todo este panorama, el PRI reforzará su influencia "bajando" los costos del gas, gasolina y quizá otros productos, pretendiendo así asegurar su triunfo en esas elecciones intermedias, que desde luego lo podrían consolidar a la presidenciales de 2018.
Aquí obviamente la pregunta que surge ineludible es: si esa es la estratagema del partido en el poder ¿el pueblo lo permitirá? Ya lo veremos. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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