Semanario Horizontes

 ¿Qué es el envejecimiento activo?

Lic. y M.C. en Gerontología Juan Ramón Almejo Vargas

almejovargas5@gmail.com

El envejecimiento activo se va a definir como el proceso de optimización de las oportunidades de salud, participación y seguridad con el fin de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen (OMS, 2002). 

Existen 3 principios que lo conforman los cuales se mencionaran a continuación:

Salud: permanecerán sanas y podrán manejar sus propias vidas cuando envejezcan.

Seguridad: cuando las políticas y los programas aborden las necesidades sanitarias, sociales, económicas, de seguridad física y los derechos de las personas mayores.

Participación: Las personas mayores seguirán haciendo una contribución productiva a la sociedad en actividades tanto remuneradas como sin remunerar

Este principio se basa en el reconocimiento de los derechos humanos de las personas mayores y en los principios de las Naciones Unidas sobre independencia, participación, dignidad, asistencia y realización de los propios deseos (OMS, 2002). 

Existen determinantes sociales en salud que la Organización Mundial de la Salud las define como circunstancias en que las personas nacen crecen, trabajan, viven y envejecen, incluido el conjunto más amplio de fuerzas y sistemas que influyen sobre las condiciones de la vida cotidiana". Estas fuerzas y sistemas incluyen políticas y sistemas económicos, programas de desarrollo, normas y políticas sociales y sistemas políticos. 

Estos determinantes van a influir en la manera en que el individuo va envejecer activamente o no, los determinantes más importantes son económicos, sanidad y servicios sociales, conductuales (consumo de tabaco, alcohol, mala alimentación, etc), personales (hereditarios o genéticos), físicos (contexto en el que nos desenvolvemos), sociales, culturales y el género (OMS, 2002).

Lo que se propone el envejecimiento activo a las políticas y programas de desarrollo es disminuir las muertes, menos discapacidad, más disfrute de una calidad de vida, participación activa ámbitos sociales, culturales, económicos, políticos, etc. Y menos gastos en atención sanitaria y tratamientos médicos. 

Las estrategias o la visión que se tiene sobre el envejecimiento activo es cambiar la cultura endémica de discriminación por edad, eliminar las barreras de edad en todos los ámbitos de la vida, mantener a los trabajadores mayores en contacto con el empleo, fomentar la flexibilidad en la jubilación, facilitar comunidades activas y el acceso a la participación comunitaria, promover la salud pública en toda la vida, aumentar el apoyo social y asegurar que la protección social continúe promoviendo la calidad social (Walker, 2002).  

Lo que puede potenciar el envejecimiento activo primeramente es tener los mejores determinantes sociales en salud, las pensiones, el empleo, la asistencia sanitaria, asistencia social y asistencia ciudadana (Walker, 2002). 

La ONU invita a los gobiernos y a las organizaciones no gubernamentales a estudiar medios eficaces para construir proyectos dirigidos a sostener el mayor grado de independencia en las personas mayores. Para lograrlo, habrá que considerar actividades de prevención y promoción integral de la salud, control de las enfermedades crónicas no transmisibles, servicios sanitarios eficientes y accesibles, así como cambios a favor de un buen estilo de vida (INAPAM, 2019). 

De acuerdo con el INEGI, el 85% de las personas adultas mayores entre 60 y 75 años de edad son independientes para realizar sus actividades de la vida diaria, gozan de salud y la mayoría aporta un ingreso económico a la familia; un 45% de las personas mayores de 76 años requieren de algún tipo de asistencia o apoyo para realizar sus actividades cotidianas (INAPAM, 2019).

El tiempo de vida funcional e independiente para las personas entre 65 y 69 años es de 10 años; entre 80 y 84 años es de 4.7 años; y para los mayores de 85 años es de 2.9 años de funcionalidad (INAPAM, 2019).