Semanario Horizontes

 Mi pensar....(Ycon algo de suerte el pensar

de muchos..)

Por Juan Carlos Fajardo

*”No hay que conformarnos con migajas que, más

temprano que tarde te cobrarán factura”

Alguna vez Abraham Lincoln dijo: Se puede engañar a todo el mundo alguna vez y a alguna persona todo el tiempo, pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo.

He decidido abordar un tema bastante relevante, un tema polémico, un tema que involucra a todos los sectores de una población, en fin, un tema del que veo como día a día polariza cada vez más a nuestra sociedad y del que no podía ser indiferente en seguir en silencio; y es que a mí percepción, sin duda alguna la política ha tenido el fin común desde hace décadas de cumplir su más rotundo objeto, de provocar confrontación y lo más importante, de dividir o polarizar a toda una población con base en una estrategia burda, pero que al final, es estrategia que les ha servido para desunirnos y vaya que de una excelente manera.

Y es que coloquialmente decimos que cada cabeza es un mundo y es muy cierto, pero así como alguno pueda diferir conmigo (lo cual es respetable) también uno tiene el derecho de externar el sentir hacia lo que percibo, desde un carácter de ciudadano hasta un joven interesado por el porvenir de su comunidad.

Charles de Gaulle, Primer Ministro de Francia en 1944 mencionó que la Politica era demasiado seria e importante para dejarla únicamente en manos de los políticos; no puedo estar más de acuerdo con ello, en un estado donde no se toma a consideración el diferir, la opinión, el debate o el cuestionamiento de la población hacia el actuar en pro de acciones que beneficien por un bien común y lejos de ello, se minimice, se tome a burla, se “borre” del mundo de las redes o se muestre indiferencia es evidente que ahí no es, la política no cumple su objetivo y lejos de eso, llegaría a convertirse en un autoritarismo con ínfulas de arrogancia.

Creo que todos coincidimos que el pilar de una persona debe forjarse con base al carácter, educación, principios y valor del que está hecha o hecho, pero sobretodo de humildad, y si es político con mucha mayor razón. Debe ser una persona que esté para actuar y representar al pueblo y no para estar tratando siempre de salvar sus dos caras a la vez y bajo eso dejar desamparado a la gente que lo pone al mando, un mando que puede llegar a un buen puerto o a un perfecto precipicio.

Todos cometemos errores en nuestras vidas, quien cuestione esto no puede estar más equivocado, si, pero lo importante es no volver a reincidir en el mismo, como juventud estoy preocupado por el nivel de estrategia que usa el gobierno para confrontarnos con los otros y es que muchos pueden mofarse o burlarse de ellos pero no nos ponemos a pensar que los que más se ríen de nosotros son precisamente ellos, los políticos.

Estoy rotundamente desilusionado pero también a la vez sorprendido, si, sorprendido por esa gran capacidad de ingobernabilidad que existe y lo digo con todas sus letras con respeto y por parejo, de gobiernos partidistas o también independientes, en nuestro estado y en nuestro municipio que se lea tal cual esta escrito.

Me parece increíble como algunos políticos creen mofarse de según ellos la “poca capacidad” de las personas para no darse cuenta de la realidad que se vive, de pensar que siempre contarán con el silencio de la población o que nunca habrá alguien que alce la voz cuando es evidente que algo no va bien, y es que esto no es para nada una cuestión de ser ignorante o de estudios, sino de sentido común, bajo esta premisa siento profundo júbilo al ver que muchos ya están alzando la voz desde su trinchera y mostrando su inquietud como una manifestación de que el rumbo no va por buen camino, porque podremos “ser ignorantes” según ellos pero ciegos o pendejos, nunca, el pueblo al final de todo, si puede ser sabio juez.

Me queda claro que hoy puedes compartir ideales, causas, pensamientos y lucha con una persona y que al otro día la misma puede cambiar como cambia el clima en un día o las manecillas del reloj minuto a minuto, así, volátil y efímero, y ahí recae el problema, porque nunca, NUNCA será justificación el tener un mejor puesto, un mejor trabajo, una mayor ganancia monetaria para ser indiferente y dejar la humildad de lado o “perder el piso” y terminar cayendo inclusive con una corrupción que corrompe barreras, recordemos que la humildad abre más puertas de las que jamás abrirá la arrogancia y así que no seamos objeto de que otros marquen nuestras vidas con la frase “Quién no tiene y llega a tener loco se quiere volver”.

Hoy, no coincido, hoy no veo un rumbo claro, hoy no puedo decir que estoy satisfecho con lo logrado, hechos son los que terminan de refutar y de evidenciar mi pensamiento, no chismes burdos o argumentos sin sostén, simplemente no veo más que ínfulas de soberbia y de burla, una falta de carácter con olor a incongruencia, el carácter se manifiesta en los grandes momentos, pero se construye en los pequeños; algo que hace falta en muchos auto-llamados “líderes” y que más que eso dan para catalogarlos como pseudo moralistas.

Esto lo escribo porque puedo y en parte porque debo, porque como jóvenes debemos estar más que nunca involucrados en la vida pública del nuestro porvenir; pero no solo nosotros, también es responsabilidad de todos, hombres y mujeres de trabajo, ¿Qué carajo queremos dejarle a nuestras nueva generaciones?; hago un llamado a todos a no conformarnos con migajas que después las consecuencias cobrarán factura para bien o para mal más temprano que tarde y quién pagará el precio será su generación venidera; mi gente, estamos cerca de las elecciones más grandes en la historia de nuestro país, cambiemos la manera de pensar, de dejar a un lado el beneficio propio y comenzar a pensar en el común, de analizar cada opción y de ver los cimientos de vida y educación que lleva detrás la mujer u hombre a quien queremos como representante para que sirva a la gente y no que se sirva de la misma.

Por experiencia personal me queda más que claro que por más análisis que hagamos no evitará al 100% que nos topemos con una persona que pueda defraudarnos en el camino, es cierto, pero es lo menos que debemos hacer para tratar de evitar que siga pasando ello.

Mi pensar… (Y con algo de suerte el pensar de muchos).