viernes, 9 de octubre de 2009


La Carreta y los Bueyes

Por Rodrigo Sánchez Sosa

EL Carretero...

Bienvenidos amigos lectores a esta su columna semanal para Horizontes, La Carreta y los B...deseando de todo corazón que tenga un buen fin de semana, comenzamos esta entrega comentándole los preocupantes acontecimientos violentos en el municipio en los que se ha visto involucrada la policía municipal. El repudio de la ciudadanía han generado hechos como en el que un joven de escasos 20 años de edad fue agredido, como ya lo comentábamos, por policías municipales hace dos semanas, dejándolo en coma dados los golpes que recibió en la cabeza por parte de los agresores uniformados, que en contra de toda ética de su trabajo, no solo agredieron sino que abandonaron al lesionado a su suerte después de que este perdiera el conocimiento por la golpiza. Actualmente esta persona vecino del barrio del santuario, se encuentra convaleciente con lesiones neuronales que le provocan convulsiones, el pronóstico para su salud es reservado. Apenas comentábamos lo anterior la semana pasada cuando, el domingo por la madrugada, de acuerdo a testigos, dos pandillas de mozalbetes del rumbo de la Candelaria y el Santuario, se liaron a golpes y pedradas en las calles del barrio del Santuario. Según versiones hasta el momento solo confirmadas por una de las partes, la policía se presentó en el lugar de los hechos y por razones aún no muy claras, usaron sus armas. Dispararon contra los rijosos, con saldo de dos lesionados, uno de gravedad. En su momento se habló de policías golpeados, sin que hasta este momento se haya confirmado tal versión. Hasta aquí la crónica de los hechos. Hechos que se antoja contrastar con otros actos violentos en el país, relacionados con el crimen organizado, pero que en este caso sería irresponsable asociar por simple amarillismo o ignorancia. Lo cierto es que el fenómeno en el municipio responde a otra dinámica social y política, muy propia de nuestro entorno. La cual pretendo reseñar para usted, con una aguda crítica al entorno comunitario que las creó: el municipio... 
La seguridad Pública, visión errónea, pero políticamente rentable...
A pesar de lo que parezca y de las quejas plañideras de los conservadores locales, Sayula es una comunidad conservadora e intolerante. Esto hace que, la política de mano dura en seguridad pública, que enarbolan algunos partidos y candidatos durante las campañas electoreras en el municipio, sean tan favorecidas con votos en las urnas. De hecho, una de las fortalezas del actual candidato electo ha sido su imagen de mano dura en cuestiones de seguridad: más policía, más patrullas, perros, caballos, bicicletas, cuatrimotos; horarios restringidos a "giros negros", ilegales "toques de queda" al arbitrio de la policía, brutalidad policíaca y abuso de autoridad, y un largo etc. Que culmina con la imagen férrea del presidente municipal, en este caso el candidato electo, que es de todos sabido su hábito de pasearse en las noches, para supervisar el mismo la seguridad, por las calles del primer cuadro de Sayula. Usted dirá ¿qué tiene eso de malo? Pues todo, si bien lo más probable es que para el futuro presidente municipal esto sea una obsesión, lo cierto que es impractico. El delito como la enfermedad, es mejor prevenirlo que combatirlo. Podrá también usted argumentar que todo lo anteriormente citado previne el delito, la violencia, la inseguridad en las calles; que la toma de los espacios públicos por parte de las fuerzas del orden le resta espacio al delito y los delincuentes. Y tampoco tendrá razón. Baste el ejemplo de CD Juárez Chihuahua, tomada prácticamente por el ejercito mexicano, sin dejar de ser la entidad donde más ejecuciones se realizan, pese a ello. ¿Entonces?....la solución solo es posible verla si se hace desde una perspectiva global. El problema de inseguridad no es una lucha de rudos contra técnicos, del bien contra el mal, sobre todo si estamos concientes de la corrupción, ineptitud y franco dolo de los elementos de la policía, cuadros y mandos. Sin olvidar la deficiente y corrupta administración de justicia, jueces municipales y ministerios públicos. ¿Quiénes son los malos? ¿los que atentan contra la seguridad pública o los que la defienden? Bien, pues entonces el discurso de mano dura no hace sino satisfacer la necesidad morbosa del conservador, del intolerante y de todos los ignorantes que creen que la violencia se resuelve con violencia. Esto no es más que un discurso político a modo para uno sociedad como la nuestra, que como la chusma de cualquier tiempo, solo quiere ver sangre, le encanta la cacería de brujas y vive para el morbo amarillista de los periodicuchos que lo explotan a más no poder en el municipio. Esto es un circulo viciosos, porque tan intolerante el encargado de la seguridad publica municipal que manda poner calentadas clandestinas a los pandilleros de la periferia, como el policía que se le pasa la mano, tanto como el pandillero que apedrea a otro barrio y a sus vecinos solo por no ser de su barrio. Esto tiene un nombre muy claro, salta a la vista: IGNORANCIA. La gente en este municipio es agredida por su preferencia sexual, su forma de vestir, el largo de su pelo, el color de su piel, el dinero que tiene, mucho o poco da igual; el barrio en el que vive, la música que oye, la religión que profesa, si toma o no toma alcohol; yo quisiera saber con qué derecho se juzga y castiga todo esto en Sayula. ¿Con el derecho que da la ignorancia revestida de intolerancia da? Porque esto no está tipificado como delito ante la ley mexicana. Si el problema es de ignorancia ¿no deberíamos voltear a las escuelas? Ahí también está la solución. No solo en el deporte señores demagogos: "hagan más canchas para que la juventud se distraiga en el deporte y no se pierda en los vicios". Yo les digo: depuremos las escuelas, erradiquemos la ignorancia. Como prueba esgrimo lo siguiente: que se le pregunte a los policías agresores y a los jóvenes agredidos cuántos libros han leído en su vida. Luego siendo honestos aceptemos el verdadero problema de seguridad, no en Sayula, en México....LA EDUCACIÓN, cara y mala.
Mientras son peras o son manzanas...
Lo cierto es que mientras esto o aquello, una persona, lucha por su vida sin que el responsable directo de la seguridad en el municipio diga esta boca es mía. Mientras nuestro pusilánime presidente municipal seguramente mete la cabeza en la arena como la avestruz ante el problema de los balaceados. La familia del que se encuentra más grave pide dinero a la gente del municipio para solventar los gastos médicos del desafortunado. Dirá usted, pues ellos se lo buscaron. Y no tendrá razón, si bien las actitudes violentas en los barrios no son justificables, lo cierto es que, la muchachada de las periferias no tiene opción en su ignorancia, se comportan salvajemente, manipulados por el cine y la televisión. Evadir la responsabilidad colectiva con un "ellos se lo buscan" es justificar esta misma situación de violencia. El municipio moralmente esta obligado a responder por una violación de los derechos de estos heridos, por parte de sus subordinados. Los policías no actuaron dentro del marco legal y esto les confiere una responsabilidad, no solo a los elementos que dispararon sino al jefe inmediato, y al responsable de este rubro Andrés Sánchez Sánchez. Es denigrante que la familia de esta persona apele a la caridad publica para salvar una vida humana, que por ese simple hecho es valiosa. Denigrante para esta comunidad en general. Nuestros valores como comunidad no son lo que pretendemos, y por ello los resultados son tan grotescos. Pretender que algo cambiará con la lección que muchos suponen se llevaron los hoy heridos, es ingenuo, por no decir ignorante. Basta con ir alas escuelas del municipio para ver a los niños de nueve, diez, doce años, que están prestos a sustituir lo más pronto posible la vacante que estas bajas dejarán. En ese pensamiento ignorante de las calles, las heridas y lesiones son medallas, reputación y respeto para el que si vuelve, será más violento; de acuerdo a la ley del péndulo, la policía tendrá que volverse más violenta. Cuento de nuca acabar. ¿Qué hacer? Nada simple, erradicar la ignorancia e intolerancia empezando por nosotros, para luego buscar la justicia social y la verdadera democracia, mientras....son peras o son manzanas ahí se ven.
PD
"Miserable cosa es pensar ser maestro el que nunca fue discípulo."
Bachiller Fernando de Rojas (1465-1541)

1 comentario:

  1. La brutalidad policiaca con Andres Sanchez se incrementa y ya no es pocible callarnos. Hay que detener a ese loco y por lo menos encerralo antes de que termine haciendose daño asi mismo, no digamos de los daños que causa a la poblacion con su politca de justicia acesina. Y que quede claro, que todos los implicados, desde quien disparo hasta quien lleva la responsabilidad de la segurida deven de ser detenidos y enjuiciados.

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